Enfermeras y enfermeros de la Ciudad de Buenos Aires se preparan para movilizarse este jueves 7 a la Legislatura Porteña, cuando se trate el proyecto de emergencia económica presentado por el oficialismo porteño.

Con la excusa de la pandemia, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta pretende asestar un nuevo golpe a los trabajadores de la ciudad (municipales y docentes), estableciendo el congelamiento total de sus salarios y así como la posibilidad de pagar en cuotas sus salarios.

Para los profesionales de la salud, marchar en rechazo a esta avanzada resulta de vital importancia como parte de la pelea contra la política ajustadora del gobierno. Quienes trabajamos en los hospitales hemos visto decrecer nuestro salario año a año, con aumentos paritarios muy por debajo de la inflación, al punto de que un enfermero de la ciudad tiene un salario inferior al costo de la canasta básica familiar.

 

¿Qué emergencia?

 

Es verdad que en la Ciudad de Buenos Aires nos encontramos en una situación de emergencia.

Desde el sector de Enfermería venimos denunciando la escasez -e incluso la falta- de Equipos de Protección Personal (EPP), y el hecho de que en muchos centros de salud se han dado insumos de pésima calidad, que no garantizan nuestra protección.

El déficit de profesionales es también un punto crítico, más cuando ha tomado estado público la alta tasa de contagios en el sistema de salud. Se necesitan hacer equipos rotativos también en Enfermería, lo que implica más personal, para poder garantizar que no se deba cerrar ningún servicio ante un caso de contagio de un profesional.

Otro elemento que aumenta el grado de exposición al virus y la posibilidad de contagios cruzados es el pluriempleo: la mayoría de los enfermeros nos vemos obligados a tener dos trabajos para poder vivir. El sector viene alertando desde hace tiempo este problema, reclamando el pase a la carrera profesional.

La satisfacción de estos reclamos, así como de las demandas de los docentes y el resto de los municipales, sería una respuesta real a la emergencia en curso, y eso es lo que debería tratar la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. No, a espaldas de los trabajadores y escondidos, una ley que busca dejar en la miseria a quienes trabajan para la municipalidad.

Son los sectores empresariales que se han beneficiado con ganancias extraordinarias estos años, saqueando los recursos de la ciudad y explotando a sus trabajadores -especuladores inmobiliarios, grandes bancos, grandes industrias, etc.- quienes deberían cargar con el costo de la emergencia, a través de un impuesto al gran capital.

Una vez más, Sutecba con el gobierno

Desde el Sindicato Único de Trabajadores y Empleados de la CABA (Sutecba), que nos debería representar, no están haciendo absolutamente nada para enfrentar este brutal ataque. En primer lugar negaron que el proyecto afectara los salarios, y solo después de una enorme presión de los trabajadores sacaron un comunicado de rechazo a esta ley, pero sin plantear ninguna medida para salir a luchar y rechazarla.

Sutecba, por el contrario, es la gremial que se encarga de firmar paritarias a la baja, y que jamás expresa un reclamo por los insumos necesarios ni por nuestras condiciones de trabajo. La misma que nos dio la espalda en el reclamo por nuestro reconocimiento profesional.

Hoy, ante el congelamiento salarial, vuelven a colocarse junto con Larreta.

Organicémonos en los hospitales

Los trabajadores de la Salud tenemos planteado dar pelea por nuestros derechos y los de la población que atendemos. Organicémonos juntos con los residentes que vienen luchando por sus condiciones de trabajo, con los concurrentes que reclaman recibir un salario, movilizándonos el día 7.

Y convirtamos el 12 de mayo, Día Internacional de Enfermería, en una gran jornada de lucha, para que en cada hospital se escuchen nuestros reclamos.

No a la ley de emergencia de Rodríguez Larreta. Por el pase a la carrera profesional de Enfermería. Por un bono extraordinario de 20 mil pesos por mes para los trabajadores de la salud.

Que la crisis la paguen los capitalistas.