Sindicales

12/6/2017

Enfrentemos la amenaza de 150 despidos en el Enacom

Agrupación Naranja de ENACOM

Los trabajadores de la Delegación Bariloche del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) denunciaron el inminente cierre de esa delegación –una decisión que les fue transmitida el pasado viernes, luego de una reunión mantenida por autoridades del Ente con su presidente, Miguel de Godoy.

 

 

En la conferencia de prensa de los trabajadores de Bariloche estuvieron presentes referentes de la CGT local, UPCN, ATE, CTA y el Partido Obrero.

 

 

La decisión no constituye un hecho aislado. Las semanas previas, los sindicatos difundieron la información de que se estarían preparando casi 150 despidos en todo el organismo. Al punto que circularon, con nombre y apellido, listas con los primeros 25 compañeros a despedir. El plan incluye –en una primera etapa- el cierre de varias delegaciones (Bariloche, Trelew, 9 de Julio, Tigre) así como cesantías en distintos sectores.

 

 

Bariloche

 

 

Hace menos de un mes, las autoridades del organismo cancelaron la atención al público y el análisis de reclamos de las telecomunicaciones (prestación de los servicios de telefonía básica, celular, internet y cable, postal, radio concentración de enlace y toda materia relacionada con el uso del radioespectro), medida que benefició directamente a Telecom, principal prestador de la región.

 

 

Con la reciente decisión del cierre definitivo de la Delegación, cesarían el resto de las funciones, correspondientes a seguimiento de contenidos audiovisuales, ingreso de trámites de licencias de radio y televisión, registros de productoras, señales y agencias de publicidad, y trámites relacionados con FOMECA (Fondo de Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual). Esta situación afecta a Bariloche y a toda la región andina, desde Villa La Angostura a El Bolsón, y la Línea Sur de Río Negro.

 

 

Reestructuración ministerial

 

 

El Enacom es un ente autárquico y descentralizado que fue creado en diciembre de 2015, fusionando Afsca (ex Comfer) y Aftic (ex Secretaría de Comunicaciones y CNC) y absorbiendo sus funciones. Por el Decreto 267/15, se estableció al Enacom como regulador de las comunicaciones con el fin de asegurar que todos los usuarios del país cuenten con “servicios de calidad”.

 

 

El organismo funciona actualmente en la órbita del Ministerio de Comunicaciones de la Nación. Se trata de uno de los ministerios nacionales que sería disuelto, acorde con la reducción de carteras anunciadas en La Nación el pasado domingo 11 –pasarían de los actuales 21 a 16 (cantidad dejada por CFK); con el consecuente desplazamiento de su titular, Oscar Aguad, protagonista de la condonación de la deuda al Correo Argentino.

 

 

El Enacom pasaría a depender del Ministerio de Modernización, de Andrés Ibarra, cartera impulsora del ajuste contra los trabajadores del Estado Nacional. El mismo abarca tanto el plan de “dotaciones óptimas” (despidos masivos) como la reciente paritaria estatal, que incluye las cláusulas de presentismo y productividad –un ataque directo al Convenio Colectivo de Trabajo, para proceder a despidos con causa.

 

 

Reaccionan los trabajadores

 

 

El pasado 24 de mayo se realizó una importante asamblea de ATE que reunió a 150 trabajadores del organismo, en el marco de una jornada nacional de lucha. Fue un síntoma del estado de movilización e inquietud que recorre a los trabajadores, que superó las expectativas de los convocantes y donde los cuestionamientos a las autoridades no fueron limitados por el “miedo”. Se reclamó, en primer lugar, la continuidad de las asambleas generales.

 

 

UPCN, gremio mayoritario, presionado por sus afiliados, declaró el “Estado de Alerta y Movilización”, con una campaña de impacto visual y de fotos en todas las delegaciones del país, que contaron con la participación total de los trabajadores.

 

 

También se realizaron asambleas sectoriales que se pusieron en pie en defensa de los compañeros señalados en las listas. En el caso de la asamblea de la delegación Bariloche, se ha contado con una amplia convocatoria de organizaciones sindicales y políticas.

 

 

Es necesaria la realización de asambleas en todos los sectores y una asamblea General sin distinción de afiliación, para rechazar el cierre de las delegaciones y la confección de listas de despidos entre las autoridades y los sindicatos.

 

 

Las primeras reacciones de los trabajadores revelan que tenemos espaldas para enfrentar esta nueva ofensiva.