Sindicales

7/12/2016|1440

Estatales de la Provincia de Buenos Aires: Rechacemos el aumento de hambre de Vidal

Vamos por asambleas y un plan de lucha para derrotar el ajuste

prosecretario gremial ATE sur


El gobierno de Vidal y los gremios aliados de UPCN, Salud Pública, Soeme y Aeri acaban de cerrar la paritaria estatal de la provincia por 15 meses, hasta diciembre de 2017.


 


Un acuerdo miserable de 2,9% por el período octubre-noviembre, una bonificación del 10% dispar, según el sector, y un aumento anual para todo 2017 de un 18% en cuatro cuotas.


 


Este acuerdo que para 2016 implica, según los gremios oficialistas y el gobierno, un aumento del 34%, en realidad no supera el 20% cuando se lo anualiza, y con una inflación anual de más del 42%, quieren realizar en los hechos una enorme rebaja salarial contra los estatales este año.


 


Pero la entrega mayor ha sido lo que respecta al aumento de todo 2017, que es un 18% en cuatro cuotas, de 4,5% cada una. Una entrega que se quiere imponer como techo para el resto de los estatales (docentes, judiciales y profesionales de la salud) y garantizar el inicio de clases en un año electoral clave.


 


Estos porcentajes de aumentos son los que se están anotando en el Presupuesto provincial del año próximo, junto con un mayor endeudamiento y recortes en salud y educación. Para esto, el macrismo se sirve del apoyo de todos los bloques patronales: del Frente Renovador, del FpV y de Stolbizer.


 


El acuerdo contempla también el pase a planta permanente de 3.500 becarios en salud, pero de a tandas y en un período de tres años. No se dice nada del pase a planta de más de 11mil auxiliares de educación mensualizados y de otros miles de contratados, sobre los cuales no hay tampoco garantías de continuidad laboral.


 


De manera contraria, ATE y Cicop han rechazado el aumento por ser insuficiente. Pero ATE, el gremio más grande de toda la provincia, no preparó un cuadro de medidas sino que impulsaron, como de costumbre, los paros de 24 horas aislados y débiles en movilización.


 


La Verde de ATE llegó al extremo de dividir en las últimas medidas a los propios estatales, con acciones sólo de administrativos y municipales y, por otro lado, con los judiciales que vuelven a parar, los médicos y la docencia combativa.


 


La Verde se excusa en la falta de participación de los compañeros, pero todas las medidas son decididas a espaldas de los trabajadores, sin asambleas ni plenarios de delegados provinciales, de un día para otro, jugando el papel fundamental en la desmovilización de los trabajadores.


 


Se hacen imprescindibles las asambleas en todos los lugares de trabajo, rechazando el aumento salarial miserable, así como la tarea de organizar plenarios de delegados con mandato de todos los estatales para definir un plan de medidas progresivas: por un salario igual a la canasta familiar y el pase a planta permanente.


 


Con esta agenda, las seccionales, juntas internas y delegados combativos de ATE tenemos el desafío de llenar la Plaza de Mayo el próximo 20 de diciembre con el clasismo, para que los trabajadores irrumpamos contra el ajuste y la tregua.