Sindicales

10/2/2000|654

Faplac: los obreros no olvidan

Faplac es una de las fábricas plásticas más negreras del país. Hace aproximadamente ocho años surgió una comisión interna combativa, encabezada por el compañero Omar Aybar, que puso límites a la voracidad patronal.


La patronal pretendió sacarse de encima a la comisión interna. Armó una causa trucha contra Omar y le inició un juicio de desafuero. Con el compañero en la calle, dio luz verde al sindicato para que convocara a elecciones de interna. El compañero se presentó, desde afuera, y arrasó con más del 70 por ciento de los votos, contra la lista de la burocracia. La patronal desconoció a la nueva comisión interna electa y montó una campaña de terror contra los trabajadores y contra los delegados. Hace aproximadamente un año y medio, en ocasión de nuevas elecciones de interna, armó un fraude descarado en directa relación con la burocracia del sindicato plástico. Después de años, la patronal de Faplac sintió que ‘respiraba’. Echó a ambos delegados, a los principales activistas, impuso condiciones de flexibilidad brutales y trasladó la empresa casi por completo a Zárate.


A fines del año pasado, se realizaron elecciones generales, de seccionales y nacionales en el gremio plástico. La burocracia las pudo realizar sin mayores dificultades en todas las plantas del Gran Buenos Aires, menos en una… Faplac. Cuando pretendió ingresar a planta para realizar las elecciones, una vez más, fraudulentas, los obreros los echaron literalmente a patadas de la fábrica, les impidieron hacer las elecciones y los obligaron a irse con el rabo entre las piernas, con sus oídos llenos de insultos, como verdaderos traidores que son.


Más tarde o más temprano, los trabajadores de Faplac también ajustarán cuentas con la patronal negrera.


¡Bravo, compañeros de Faplac!