El pasado 8 de agosto se llevaron a cabo en la Universidad de Formosa las elecciones para los Consejos Directivos y Superior por el claustro docente. Fue la primera vez que se presentaban listas de oposición en toda la historia de la universidad. Sólo esto ya constituyó un triunfo del reagrupamiento de las fuerzas sanas y democráticas que comenzaron a alzarse contra las camarillas que sostuvieron al nefasto ex rector Dalfaro y todavía permanecen en sus cargos.

El resultado de las elecciones refuerza esta tendencia. En la Facultad de Economía la lista de oposición en auxiliares se alzó con el 45% de los votos. ¡Sólo quedamos a 6 votos de ganar la mayoría en la propia cueva de los ladrones! En la Facultad de Humanidades se logró obtener el 40%. En ambos casos se logró meter a los consejeros por la minoría. Las listas oficialistas estaban apoyados por el aparato corrupto y amedrentador del gildismo, e incluso llevaban a conocidas figuras del gobierno provincial en sus listas. Esto le da más valor al resultado logrado. Con el valiente apoyo de los compañeros docentes logramos romper el monopolio de los grupos privatizadores en los órganos de gobierno. Formosa no está ajena a las luchas que sacuden la universidad en todo el país. Vamos por más.

Los estudiantes ya se están sumando a esta corriente de lucha y se están organizando para desalojar a los centros y consejos a las agrupaciones de punteros del PJ. Hay que desarrollar y profundizar la unidad docente-estudiantil que imponga el viraje necesario en el contenido y la orientación de la universidad y la rescate del profundo pozo en que la han hundido.