Sindicales
26/8/2004|865
Gotelli y Bakchellián mienten
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Gotelli, testaferro de Bakchellián y uno de los que integran, con Techint, la corriente "kirchnerista" de la UIA, está recorriendo las localidades de Suárez y Pigüé con el anuncio de la "inminente puesta en marcha de las plantas de Gatic". También dice que la deuda con los trabajadores del viejo patrón Bakchellián "podría” cancelarse. Gotelli está hablando de un plus de 300 pesos para los que entren a trabajar, mientras la deuda total supera los 70 millones de pesos. Además, el canon anual no alcanza siquiera para cubrir la deuda con los bancos y la Afip (los llamados "acreedores privilegiados”). El nuevo verso incluye el "reconocimiento" de la antigüedad, pero sin aclarar que se trata de cinco años como tope.
El dato más relevante es su confesión de que en Pigüé ingresarán 120 compañeros mientras la Cooperativa tiene un listado de 206, y que en la planta de Suárez ingresarían en lo "inmediato” poco más de un centenar de trabajadores de un padrón de 1.800. La burocracia del caucho de Suárez "se queja” ahora por las promesas incumplidas, pero sin "lamentar” el desalojo de Gatic Pigüé (todo lo contrario, pues fue su cómplice).
Lo concreto es que, a pesar de las solicitadas pagadas por Gotelli-Bakchellián (y sostenidas por el gobierno), los vaciadores de Alpargatas y Gatic no pretenden reincorporar a cientos de trabajadores, y se terminan los subsidios y las promesas.
En su solicitada, Gotelli dice que los trabajadores avalan el "acuerdo”. La verdad es que en Suárez los obreros fueron estafados por la patronal y la burocracia. Es la hora de preparar una nueva Asamblea General que imponga el ingreso de todos al trabajo, el reconocimiento de la antigüedad sin recortes, el pago de la deuda íntegro y el respeto a los derechos de los trabajadores y al convenio.
Gatic Pigüé debe ser devuelta a los trabajadores de la cooperativa. El desalojo de la cooperativa de Pigüé es una factura que todos los obreros de Gatic se cobrarán con la lucha que se avecina.