Sindicales

27/7/1989|275

Gran iniciativa de lucha de Periodistas

Una importante asamblea de trabajadores de prensa a la que concurrieron cerca de 500 compañeros (la cifra más alta en muchos años) decidió Iniciar un plan de lucha por 350% de aumento salarial para julio y el fin de tas suspensiones y despidos que han crecido rápidamente en este último período.

La resolución incluye la formación de un Comité de Lucha (que ya comenzó a funcionar), formado por delegados, activistas y la Comisión Directiva, un plan de paros escalonados, la realización de una movilización callejera y el trabajo por una acción coordinada con los compañeros gráficos, locutores y demás trabajadores de los medios de difusión y aquellos que se encuentren en conflicto por reivindicaciones similares a las del gremio de prensa.

Este contundente planteo de los trabajadores fue en respuesta a la postura patronal que, en las paritarias, ofreció un 115% para julio, un 30% para agosto y un 10% para setiembre y que fuera rechazada por la delegación paritaria sindical.

La asamblea mostró el clima de combatividad que reina en el gremio. La casi totalidad de las intervenciones estuvieron orientadas a apoyar el plan de lucha y a realizar denuncias de las respectivas patronales, así como a explicar los conflictos que existen en distintas empresas del gremio.

Este espíritu no viene del aire. Tiene su antecedente en las grandes luchas que -por reclamos salariales y contra los despidos y suspensiones - han recorrido el gremio en este último tiempo. Entre los más importantes estuvieron el masivo paro de prensa por los despidos en La Razón; la ocupación del diario Clarín -junto a los gráficos- en reclamo de un aumento de salarios del 328%; el paro general por 72 horas de la agencia NA por el pago de salarios y por aumentos de salarios (por primera vez en muchos años se bloqueó la salida del diario y del servicio de la agencia, respectivamente) y la movilización en Editorial Abril por las suspensiones masivas, que conquistó el pago de los salarios caídos y la reincorporación paulatina de los suspendidos.

Las patronales intentan una maniobra. En la paritaria ofrecen una miseria pero las mismas grandes empresas que pilotean la negociación están proponiendo cifras sustancialmente mayores a sus trabajadores.

Esto tiene el obvio objetivo de desmembrar al gremio quitando la fuerza de las empresas con mayor organización sindical, manteniendo sueldos miserables para todo el resto. Hay que romper la maniobra y canalizar las negociaciones hacia las paritarias. La consigna debe ser: aumento unificado para todo el gremio.