Sindicales

23/12/1999|651

Gran movilización de los desocupados

La anunciada culminación de los planes ‘Barrios’ y ‘Trabajar’, al 31/12, ha impulsado la continua movilización de las comisiones y movimientos de desocupados, que ya se venían produciendo por los masivos cortes de luz que sufren las barriadas. Es así que, desde octubre, la movilización fue en ascenso llegando al corte de la Avenida Luro, con unos 400 compañeros y otros 3 cortes de arterias en otros barrios, incluida la Ruta 88 en Batán. Aunque la movilización de los distintos barrios es dispar, es notoria la movilización de los barrios que lograron el bolsón alimentario de la Cámara de supermercados, por medio de la ocupación de los mismos.


A pesar de que las autoridades municipales lo ‘dan por descontado’, la continuidad del plan Barrios (hoy con 1.500 beneficiarios) no está garantizada y mucho menos las condiciones de dicha continuidad (¿cuántos? ¿Habrá reducción salarial? ¿Con qué horario? ¿En qué lugar? ¿Con pasantías?). Ruckauf tampoco ha hecho precisiones sobre los planes ‘Bonus’, para jóvenes, y ‘Segunda oportunidad’ para mayores de 40 años, todo lo cual ha abierto una gran expectativa y la posibilidad de una mayor movilización a partir de un masivo empadronamiento en los barrios. Con este movimiento, que reclama la recontratación de los planes ‘Barrios’ y ‘Trabajar’, el blanqueo y pase a planta permanente de los que tenemos 2 años y medio en negro, la incorporación de los listados de los barrios, etc., va a empalmar con la movilización de los trabajadores del pescado, que están reclamando un subsidio igual a la garantía horaria del gremio (500 pesos).


En este cuadro convulsivo, las centrales obreras brillan por su ausencia (CGT, Mesa Gremial). La CTA con las Pymes organizan tardíamente asambleas contra los cortes de luz, con la condición proscriptiva de que las organizaciones ‘invitadas’ deben tener personería gremial.


Los conflictos de desocupados y trabajadores del pescado, más el de los estatales (contra la flexibilidad laboral), deben ser centralizados en un gran polo clasista, para disputar políticamente el destino de la ciudad, copada por los privatizadores de las playas y lugares públicos, la obra pública ligada a las empresas privadas y a la especulación inmobiliaria y los lavadores de dinero del narcotráfico.