El 23 de mayo, la Lista Azul y Verde de la AEDGI obtuvo un resonante triunfo en las elecciones de la Seccional Capital y Agencias (por 52 votos) sobre la lista de Martínez y su banda. La burocracia había apelado durante los últimos veinte meses a todos los recursos posibles para evitar que la voluntad de los compañeros expresada en las urnas se materializara en una nueva conducción. Para lograr su propósito intentó primero el fraude y luego la judicialización, en combinación con sus influencias en los ámbitos oficiales, el Ministerio de Trabajo y la CGT. Lo único que logró fue vaciar la vida gremial y de la obra social. Mientras ejecutaban estas patrañas, la Azul y Verde encabezó las luchas de los pasantes y contratados, logrando dos triunfos resonantes.

Luego del recuento de la última urna y de la proclamación de la lista ganadora, fuimos a la sede de la Seccional, sacamos a los matones y tomamos posesión del edificio vedado a los afiliados por 20 meses de usurpación.

El 24 de mayo realizamos la primera reunión del Consejo Directivo Superior de la AEDGI, recién completado por los consejeros de la Seccional Capital y Agencias, contando con 30 consejeros, mayoría suficiente que permitió fijar la fecha para la próxima reunión del Consejo, que deberá elegir la Mesa Directiva Nacional, y designó a los compañeros de la Comisión Negociadora ante la patronal.

Se presenta en el futuro inmediato un gran desafío. Hay que revertir la parálisis establecida por Martínez en complicidad con la patronal. Realizar asambleas en los lugares de trabajo, convocar al Plenario de Delegados y a una Asamblea General, votar un pliego de reivindicaciones que debe contemplar el aumento salarial de 300 pesos para el grupo 3, el reencasillamiento en las categorías que corresponden, el pase a planta de los contratados, la estabilidad, la finalización de los interinatos y la bolsa de trabajo en manos del sindicato.