Sindicales

15/12/2020

BALANCE

GRI Calviño: reincorporación de todos y flexibilización

Conclusiones de esta gran lucha.

La tenacidad de los trabajadores de la metalúrgica GRI Calviño logró imponer la reincorporación de los 66 despedidos luego de un largo conflicto, pero la burocracia de la UOM aceptó la flexibilización laboral de manera inconsulta.

El conflicto de la metalúrgica, ubicada en Bosques, comenzó abiertamente a mediados de septiembre cuando la patronal largó un lock out como medida de extorsión para imponer una flexibilización laboral. Luego, la empresa despidió 66 trabajadores para intentar quebrar la voluntad de lucha de los trabajadores, sin éxito.

La cúpula de la UOM, con Caló, Furlán y el Barba Gutiérrez a la cabeza, decidió firmar un acuerdo con la multinacional sin consultar con la asamblea de base ni con los delegados. La bronca de los trabajadores se hizo sentir rápidamente, denunciando la entregada por parte de esta burocracia sindical que jugó al desgaste del conflicto desde el día uno.

Todos adentro, conquista de la combatividad obrera

La reincorporación de los 66 trabajadores es producto de la lucha que dieron los metalúrgicos, dejando en claro en cada asamblea y en cada audiencia que continuarían el conflicto hasta reincorporar a todos. La empresa intentó sostener los despidos de unos pocos trabajadores para mostrarlo como “botín de guerra” frente a la cúpula empresaria ubicada en España, pero no pudo concretarlos.

Luego de finalizada la conciliación obligatoria, a fines de noviembre, los trabajadores decidieron realizar una movilización a la cámara patronal y al Ministerio de Trabajo de Nación, quebrando la presión del Barba Gutiérrez, que lidera la seccional UOM Quilmes, para planchar la lucha por completo. Esa acción, junto al festival que se realizó pese al amedrentamiento policial, obligó a la patronal a sentarse a negociar ante la evidencia de la fuerza que mantenían los trabajadores.

Caló y el Barba con la flexibilización

Cuando la empresa estaba apretada con los tiempos para comenzar la producción, la cúpula de la UOM colaboró con la empresa para que pase la flexibilización laboral, agregando más tareas y oficios al conjunto del personal. No se respetó el reclamo de plus salarial que exigían los trabajadores por esas tareas nuevas, y no se consultó en la asamblea de fábrica sobre la aceptación o rechazo de este acuerdo. El Barba Gutiérrez, que asistía con frecuencia a las asambleas para intentar “aflojar” a los trabajadores, era consciente que no podría doblegar a los trabajadores en la deliberación, por eso acordaron de espaldas a la base.

Con esta entregada, estos “dirigentes” que conducen la UOM se muestran como los candidatos que las patronales y el gobierno necesitan a la cabeza de los sindicatos, los que ignoran las decisiones de los trabajadores y dejan pasar la reforma laboral.

Defender la organización interna

Un punto nefasto del “acuerdo” que firmaron Caló y el Barba es el que intenta suprimir la actividad gremial interna. A pedido de la patronal, pero seguramente con mucho gusto por parte de la cúpula de la UOM, el acuerdo señala que la comisión interna no puede tomar medidas de acción directa por ningún reclamo, sea cuál sea. El “modus operandi” implica, según el acta, la paralización de la actividad gremial de los delegados, ya que cualquier reclamo debe ser presentado por la directiva seccional a la empresa, y si no hay solución en 48 horas se conforma una “mesa de trabajo” de la patronal con Caló y el Barba, es decir, quienes concretaron la entregada.

Este punto no debe ser considerado al margen del ataque antisindical y persecutorio que la patronal realiza desde hace tiempo sobre los delegados, incluyendo un intento judicial de desafuero de cuatro de ellos. El abandono de este ataque por parte de la patronal, debió ser un punto fundamental del acta acuerdo, pero está ausente, para el beneficio de las partes que lo firmaron: la patronal y la burocracia.

A sacar todas las conclusiones de esta lucha

La experiencia que han atravesado estos trabajadores y las conclusiones que se extraen de ella son muy significativas para el conjunto de los luchadores del movimiento obrero. La patronal contó durante todo el conflicto con la colaboración del Ministerio de Trabajo bonaerense, con impronta camporista, permitiendo que la empresa sostenga el lock out, liquide mal los salarios y abriendo y cerrando una conciliación obligatoria en los tiempos que reclamó la patronal, que dicho sea de paso la desconoció en los hechos. Ni hablar de la disposición de la policía bonaerense de Kicillof y Berni al interior de la planta contra la ocupación que llevaron adelante los trabajadores.

Por otra parte, el rol de la burocracia se expuso crudamente en el desenlace del conflicto, pero jugó un rol de desgaste desde el comienzo, evitando tomar medidas de lucha desde la seccional, ni un día de paro en apoyo a esta lucha, ni movilizaciones, ni asambleas en las otras plantas para reforzar el fondo de lucha. El Barba solo convocó en una ocasión a un sector de los delegados a la puerta de la planta y una decena acompañó en una movilización a La Plata.  Su orientación en el conflicto de GRI Calviño tiene dos aspectos que tienen que ser clarificados ante el conjunto de los metalúrgicos; a pocos meses de las elecciones de la UOM donde él se juega su continuidad liderando la seccional, por un lado, buscó mostrarse “al frente” del conflicto aunque lo aisló en los hechos, e intentará atribuirse las reincorporaciones por las que no hizo nada; sin embargo, por el otro lado, se mostró hacia el conjunto de la burocracia de la UOM y de las patronales como un elemento de contención y aislamiento de una lucha obrera.

El camino de lucha y organización, respetando la decisión de asamblea y con la acción directa en busca de las reivindicaciones de los metalúrgicos, es el que hay que defender en GRI Calviño, y es la continuidad de un proceso en fábrica que lleva más de un año. Estas son las bases para poner en pie una agrupación clasista y antiburocrática con la perspectiva de ser una alternativa a la burocracia sindical que conduce la UOM nacional y seccional.

Convocamos a todos los compañeros de GRI Calviño a movilizarse con el clasismo este viernes 18 por las más sentidas reivindicaciones obreras.