Sindicales
8/9/1987|197
Hospital Español: Victoria sin precedentes

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La lucha de los trabajadores del Hospital Español concluyó con una resonante victoria, al obtenerse un 20% de aumento en agosto, un 10% más en septiembre, el pago de dos días de huelga (sobre cuatro) y naturalmente, el compromiso de no tomar ninguna represalia con los huelguistas.
Un triunfazo, conseguido no sólo contra la patronal y el Ministerio de Trabajo, sino también contra la burocracia de ATSA y la Comisión de Reclamos del Hospital (cogobernada por West Ocampo y el Mas), quienes abandonaron la lucha para sumarse al bloque patronal.
La lucha del Español es fundamental, no sólo porque pone de manifiesto la profunda voluntad de combate de la base de Sanidad, sino también porque es una perfecta radiografía de las fuerzas políticas que se mueven en el seno del gremio.
Crónica de la lucha
Martes 18/8: por abrumadora mayoría, las asambleas de cada turno votan comenzar el viernes 21 paros de 24 horas en reclamo de un aumento de ₳ 100. Esta moción triunfa, contra la moción presentada por la Comisión de Reclamos (West Ocampo-Mas), que, con el argumento de “consultar a todos”, rechazan las medidas de lucha.
Viernes 21/8: el paro comienza con gran fuerza en todos los sectores del hospital y continúa de la misma manera el lunes 24.
Lunes 24/8: el Ministerio de Trabajo intima a levantar las medidas “para posibilitar las negociaciones”.
Martes 25/8: las asambleas de los tres turnos votan desconocer la intimación ministerial y ratificar la continuidad de las medidas. A partir de ese momento, la mayoría de la Comisión de Reclamos comienza a trabajar contra la huelga. La delegada general (Mas) nos sintetiza, en una frase hoy célebre en el Español, el pensamiento del bloque West Ocampo-Mas: “Arréglense como puedan”. Así nace el acta firmada por los delegados del Mas y de la burocracia donde, negro sobre blanco, desconocen las resoluciones de las asambleas de los trabaja-dores, acatan la intimación del Ministerio de Trabajo y “deslindan responsabilidades”. Esta acta, verdadero documento policial, fue entregada a la patronal y al Ministerio.
Los delegados salen a recorrer el hospital amenazando con la Ilegalidad y los despidos. Pese a todo, pese a los patrones y a los delegados carneros, los trabajadores “se arreglaron” y el paro se mantiene.
Miércoles 26: el Ministerio de Trabajo dicta la conciliación obligatoria, que es aceptada por la asamblea.
Jueves 27/8: aparece Darío Pereyra con sus matones por el Español y convoca a una asamblea para "hacer tronar el escarmiento” contra los que encabezaron la lucha. En esta asamblea es agredido el compañero Raúl Castells, dirigente de la lucha, por la patota de West Ocampo y Darío.
Viernes 28/8: audiencia de conciliación en el Ministerio. Por un lado, la secretaria general y sus 5 delegados. Del otro lado del salón, una treintena de trabajadores que ponen la cara frente a la patronal hasta que ésta finalmente cede.
Balance de la lucha
La lucha del Español resaltó la terrible presión combativa de las bases de Sanidad quienes, contra la patronal, contra el ministerio, y aun contra sus propios delegados, salió a la lucha y supo pelear y ganar.
La dirección del Sindicato estuvo ausente por completo, salvo en el momento en que el conflicto parecía flaquear, y no precisamente para apuntalarlo sino para hundirlo y golpear a los luchadores. Con. la lucha del Español, Darío Pereyra ha sacado patente de burócrata consumado.
Un párrafo aparte merece la conducta del Mas: renegó de la lucha, militó contra el paro, firmó el acta miserable, se burló de la soberanía obrera expresada en las asambleas.
El Mas. al igual que la burocracia de ATSA y West Ocampo, se subordina por completo a la patronal y al Ministerio de Trabajo y no vaciló en romper la unidad de lucha de los trabajadores frente a los patrones y la burocracia.
Esta conducta vergonzosa, llevada adelante con el sonsonete del "decidamos entre todos”, retratadla impostura de esta corriente política. En el Español, el Mas se ha comportado como una verdadera banda antiobrera.
La enseñanza fundamental de la lucha del Hospital Español, y su triunfó es que el único camino para terminar con la miseria y arrancar los reclamos es la acción independiente del Estado y de la burocracia sindical; llamamos a fortalecer la única agrupación que combate por una alternativa independiente de la burocracia en Sanidad: la ASIS.