Sindicales

10/10/2013|1289

Huelga general en Cedinsa

Ante la amenaza de cierre

El jueves 3, la patronal de Cedinsa anunciaba al personal que no disponía de los fondos para pagar los sueldos, que estaba haciendo todas las gestiones posibles para conseguirlos, pero la fecha de cobro era incierta. Los trabajadores reaccionaron con un paro general, lo cual en principio parecía una acción de lucha exagerada, dado que la patronal tenía legalmente tiempo hasta el lunes para pagar. Pero la realidad mostraría que la medida fue un gran acierto.


El viernes a la mañana, el director general de la empresa convocó una reunión con todos los trabajadores. Allí informó del traslado de todo el sector administrativo de la empresa, lo que dejó en evidencia una crisis de alcance mayor. El argumento de la "mudanza" fue una supuesta auditoría pedida por un comprador brasileño, para ver si "dan los números" para comprar la empresa. La explicación del director general sembró aún más incertidumbre. Se votó en asamblea mantener la huelga general, hacer la denuncia por vaciamiento en el Ministerio de Trabajo, y hacer guardia el fin de semana para bloquear la puerta, para evitar la salida de mercadería o maquinaria.


El lunes 7, mientras se fijaba una nueva audiencia en el ministerio, los rumores de venta o cierre continuaban. Los trabajadores resolvieron en asamblea un plan de lucha que consiste en recorridas con el fondo de huelga, una movilización a las oficinas del presidente del grupo Ocsa (dueño de Cedinsa) al Ministerio de Trabajo de Vicente López, y exigirle al Sindicato Gráfico un plenario de delegados urgente para discutir el apoyo a la lucha de Cedinsa. Al panorama incierto planteado por la patronal, los trabajadores de Cedinsa le contraponen la unidad y una gran firmeza y disposición de lucha.