La lucha de los trabajadores del INTI ha pegado un salto ade­lante, luego de 40 días de conflic­to, desatado a partir de la disponi­bilidad de 40 compañeros.

La pretensión de las autorida­des, en medio de las vacaciones, se topó con la férrea oposición encabezada por la comisión inter­na. Ya con el regreso de las vaca­ciones, el parque fue escenario de una masiva asamblea, que votó la continuidad y profundización de las medidas de fuerza (paros progresivos con moviliza­ción). El primer paso de ese plan de lucha (paro y concentración el 18/3), fue masivo, a pesar de las inclemencias del tiempo, y de­mostró la voluntad de lucha de los compañeros.

El conflicto ha trascendido a la opinión pública y a los medios de difusión, lo cual también es otro éxito de la movilización.

La gota que ahora ha rebalsa­do el vaso ha sido la suspensión dispuesta contra 38 compañeros del departamento de Física, san­cionados por solidarizarse con u n compañero de la sección cuya autorización para capacitarse en el exterior había sido denegada por los directivos. La medida dis­ciplinaria ha acicateado los áni­mos de los trabajadores del INTI.

Entramos, ahora, en una eta­pa crucial del conflicto.

La dirección de UPCN, del ultramenemista Andrés Rodrí­guez, se está reuniendo con las autoridades a espaldas de la Comisión Interna. El propósito es sacarle a la comisión interna la conducción del conflicto para po­der estrangularlo. Las reuniones “secretas” han sido denuncia­das públicamente por la comisión interna y rechazadas por los compañeros de planta. Las auto­ridades han optado, a partir de ese momento, por interrumpir las negociaciones, mientras el sindi­cato se ha borrado del conflicto. Los representantes del otro sindi­cato involucrado, ATE, se han limitado a su tradicional demago­gia antigubernamental, pero no hacen nada efectivo para la orga­nización y lucha en defensa de los trabajadores. ATE ha circunscrip­to su intervención a los “sancio­nados de Física”, olvidándose de bs disponibles, a pesar de que ambas cuestiones son parte de una misma ofensiva.

La etapa en la que ingresamos nos plantea persistir y afianzar el camino de lucha y organización independiente seguido hasta aho­ra, defendiendo la integridad de la plataforma de reclamos, rein­corporación de los 42 disponibles, el levantamiento de sanciones y medidas disciplinarias, el compro­miso de las autoridades de que no habrá ningún despido y el recono­cimiento de la comisión interna como única habilitada para hablar en nombre de los trabajadores del INTI. En CONEA, CONET y otras dependencias afiliadas a UPCN existe una perspectiva de ataque similar a la del INTI, lo cual plantea formar un movimiento en común.