Sindicales

9/3/2024

Jubilados: no a la movilidad trucha

Romina Del Plá presentó un proyecto de Ley de movilidad jubilatoria que parte de un haber mínimo de $579.000 indexado mensualmente.

Foto de archivo

El 13 de marzo ha sido convocada una sesión especial de la Cámara de Diputados para tratar proyectos de modificación de la movilidad jubilatoria por pedido de los bloques Hacemos Coalición Federal y la Coalición Cívica.

Han presentado un proyecto que tiene el atractivo de una actualización mensual por inflación según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) pero concluye siendo un fraude ya que parte de desconocer la gigantesca pérdida que han sufrido los haberes con la escalada inflacionaria del 70% acumulado en tres meses y dejan pasar el aumento irrisorio de Milei del 27,18% en marzo incluidos los bonos sobre jubilaciones mínimas de $134.446, menos de la mitad de la línea de indigencia. Dejan para abril una suma del 20% completamente insuficiente con la que habrá que afrontar 3 meses de inflación.

Así le tienden la mano al gobierno, frente a una indignación popular que crece, para disimular el brutal robo que vienen sufriendo los adultos mayores que perdieron el último año un 32,5% en términos reales y siguen perdiendo.

Por su parte la diputada Romina Del Plá del Partido Obrero en el FIT-U presentó un proyecto de Ley de movilidad jubilatoria que parte de un haber mínimo de $579.000 indexado mensualmente por el IPC.

Esta cifra corresponde a la actualización de la Canasta Básica del Adulto Mayor que trimestralmente elabora la Defensoría de la Tercera Edad de CABA. Es la verdadera respuesta a una situación desesperante de jubilados y pensionados que pierden gracias a la “licuadora” de Milei sumada a las movilidades ruinosas de Macri y Alberto Fernández .

El proyecto también considera a aquellos que por apenas superar la mínima y con aportes por 30 años o más, ni siquiera recibieron bonos, los parches electorales de Massa que siguieron congelados durante la estampida inflacionaria. Para estos el proyecto propone respetar las escalas a partir de esta mínima y una actualización equivalente al 82% móvil del salario de los trabajadores en actividad en la misma categoría que revistaba al retirarse el jubilado, o actualizar por inflación, lo que fuera más conveniente para el trabajador.

Las causas de una masacre social

En sus Fundamentos el proyecto refuta los “relatos” que justifican la destrucción de los haberes con los argumentos más disparatados, “que el sistema no cierra porque aumenta la expectativa de vida, porque hay menos aportantes y que hay muchos que se jubilan con pocos o nulos aportes. Con esto último pretenden estigmatizar e incluso dividir a los adultos mayores que en los sectores más precarizados y peores pagos, como las trabajadoras de casas particulares serían responsables de la evasión patronal. La falta de aportes es una responsabilidad patronal y contra la evasión y elusión tiene que accionar el Estado en defensa del trabajador estafado sea por el trabajo informal, precario o por que le descontaron sus aportes y no fueron depositados”. Por eso, para obtener los recursos que den cumplimiento a esta Ley, además de un impuesto a la renta financiera y los aportes del Tesoro Nacional el proyecto plantea multas extraordinarias al trabajo no registrado o registrado en forma fraudulenta.

El Estado es el responsable del vaciamiento de la Anses toda vez que hace “la vista gorda” frente a un 40/50% de trabajo no registrado o declarado defectuosamente. Nada que sorprenda desde el momento en que las empresas y el propio Estado engorda el salario con sumas no remunerativas que no tributan a las jubilaciones. O las diversas formas de fraude laboral, con falsos monotributistas que se desempeñan en la misma tarea por años. Por eso hay jubilados que cobran entre un 10 y un 20% por debajo del haber mínimo. Son los millones que entraron en la moratoria y pagan una deuda que deberían pagar sus patrones, lo mismo las personas obligadas a inscribirse en la Puam que ni siquiera constituye un haber sino más bien una asistencia social subalimentaria.

El Estado no solo actúa para la clase capitalista fomentando la evasión patronal. Lo hace directamente al apropiarse de los fondos previsionales pertenecientes a los jubilados, fondos que son utilizados para todo tipo de negociados y ahora con el arrebato del Fondo de Garantía de Sustentabilidad. Primero, el pasaje compulsivo de los fondos en dólares a pesos de Massa, luego Milei devaluando y transfiriendo esos bonos al Tesoro.

Vuelve a demostrarse que son los jubilados los que siguen sosteniendo al Estado y no al revés.

Una lucha fundamental. El 13 todos al Congreso

La lucha de los jubilados es una lucha de todos los trabajadores que se verán condenados a una prestación de indigencia aún con décadas de aportes. Los jubilados tienen un proyecto alternativo para defender. Es imprescindible movilizarse para imponerlo. No hay forma de hacerlo sino en las calles.

¡Todos al Congreso!

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