El 23 de julio vence la prórroga de la moratoria para mujeres (es la única vigente) mayores de 60 años y menores de 65.

Se informa que hay unos dos millones de adultos mayores en edad de jubilarse que no tienen los requisitos de la ley previsional que establece 30 años de aportes provenientes de sueldos en blanco.

Esto se debe a la falta de una moratoria que abarque al conjunto de estos trabajadores, con su vida laboral en el marco de la informalidad y los contratos en negro. Este universo está formado mayoritariamente por mujeres (trabajadoras de casas particulares, cuidadoras, costureras, trabajadoras domiciliarias y de tareas en el campo) y por hombres principalmente que en la década menemista del ’90 fueron despedidos en masa durante el proceso de las privatizaciones y tuvieron que continuar en changas de diversa índole.

El brutal crecimiento de las contrataciones en negro, que llevan a abarcar a la mitad de la clase obrera del país, ha sido un recurso impulsado por los gobiernos especialmente desde el menemismo, profundizado durante el kirchnerismo y el macrismo y sigue vigente hasta el día de hoy. Al punto que ocho de cada diez puestos de trabajo pospandemia son en negro. Forma parte de un recurso exigido por la burguesía de todo pelaje para aumentar la plusvalía de cada trabajador y con esto las ganancias patronales que entre otras cosas se evitan todo aporte de “cargas” sociales, derecho a vacaciones y licencia por enfermedad o embarazo así como el impedimento de organización sindical.

El kirchnerismo y su proyecto de pago de deudas previsionales para la gilada

El proyecto salido del Senado por iniciativa de los senadores kirchneristas Recalde y Fernández Sagasti tiene un título significativo y contundente. Es el trabajador el que debe pagar los períodos faltantes. Se llama Plan de Pago de deuda previsional. Plantea “comprar años” por parte del trabajador con períodos faltantes.

Es un proyecto parcial, que abarcaría a 742.000 trabajadores dejando al 1.200.000 restante en la Puam (80% de la mínima, cobran de bolsillos unos $26.000) a la que acceden solo los que demuestren condiciones socioeconómicas paupérrimas.

Este proyecto que ha entrado en diputados y no tiene fecha de tratamiento exculpa a todas las patronales negreras, a los gobiernos, partidos políticos y funcionarios que apoyaron las privatizaciones y dejaron desde ese momento a miles de trabajadores sin trabajo en blanco y sin posibilidad de ingresar a ningún otro en esas condiciones o que apoyaron la reforma laboral que abrió el camino de la generalización de los contratos precarios y en negro.

La dilación en el tratamiento y el muy posible no tratamiento por orden del FMI que ha planteado su oposición a toda moratoria, deja en total desprotección a estos millones de adultos mayores.

Por moratoria universal ¡ya!

Desde el Partido Obrero elaboramos con la diputada Romina Del Plá un proyecto de moratoria universal sin pago de cuotas por parte del trabajador. Sin “compra de años”.

El trabajador sin aportes previsionales, sea en parte o en toda su vida laboral, ha contribuido con su trabajo, con su labor, a que su patrón tenga sus ganancias que se acrecientan porque no pone las cargas sociales. El trabajador ha contribuido con el pago de los impuestos directos e indirectos que van a la Anses como el IVA y muchos otros.

Los argumentos de desfinanciamiento que blanden todas las bancadas patronales no tienen sostén. Los fondos jubilatorios son usados por todos los gobiernos para sostener con subsidios al capital (en su momento empresas como General Motors). Durante la pandemia resolvieron los ATP con lo que la Anses pagaba los sueldos de 300.000 empresas que se anotaron “en crisis” entre las que estaban las de Techint y las de Magneto entre otras. En otros momentos se han pagado los Repro. Recientemente se ha subsidiado la exploración y explotación petrolera en el Atlántico. Los fondos de la Anses se usaron para contener la corrida cambiaria.

A este vaciamiento se suman las políticas de eximición de aportes patronales en sucesivos períodos, laretención constantes de los mismos a los obreros en blanco, junto con el “ahorro” de las cargas sociales de los contratadores en negro.

El proyecto de “moratoria universal ya” que impulsa en Partido Obrero sostiene el blanqueo de todos los trabajadores bajo el mejor convenio, la restitución y actualización de los aportes patronales, un impuesto a las grandes fortunas y rentas en especial a los que vienen contratando en negro (o la versión miserable de blanqueo trucho del monotributo), la devolución de todos los fondos usados para subsidiar al capital, la derogación de la Puam y la incorporación de todes a la jubilación ordinaria con plenos derechos.

El Plenario de Trabajadores Jubilados ha planteado a las demás organizaciones de jubilados de todo el país hacer una jornada nacional de lucha a Plaza de Mayo y a las plazas del poder político el 22 de julio.

Por aumento de emergencia y mínima de 120.000, moratoria universal ya, movilidad automática por inflación y por sueldos, 82% del mejor sueldo, dirección electa de la Anses, cajas provinciales, Pami y las obras sociales de trabajadores y jubilados.

https://prensaobrera.com/politicas/el-plan-batakis-merece-un-paro-nacional-y-un-plan-de-lucha