Luego de 18 días de acampe en las puertas de la planta de General Rodríguez y una ocupación simultánea -que continuará hasta que el acuerdo se ponga en marcha- en las instalaciones de Lomas del Mirador, de donde fueron desvinculados en febrero, la organización de los trabajadores y trabajadoras de Just en La Matanza ha significado un avance en la defensa del trabajo.

El 8 de abril, luego de varias reuniones con Just Latam, los trabajadores han firmado un acuerdo que los incorpora a “Transfarmaco”, una empresa ubicada en Escobar. Allí realizarán las mismas tareas que desarrollaban en la planta distribuidora, se les garantizará la movilidad y una gratificación por aceptar el traslado de los puestos de trabajo. El acuerdo contiene, además, la prohibición de despidos por dos años y una jornada de trabajo de siete horas y media diarias. Conservarán los años de antigüedad y no habrá modificación en sus salarios.

Se incorporarán sin convenio de trabajo, en este sentido queda el desafío de defender este derecho con todos los derechos que ya han adquirido, sin ningún retroceso. En un contexto en donde las burocracias sindicales están firmando paritarias a la baja y abandonando cualquier tipo de apoyo o “guiño” a las luchas en curso, este acuerdo de los trabajadores de Just es un paso adelante para defender las condiciones laborales. Ante la inmovilidad de los sindicatos alineados al gobierno, la organización y los planes de lucha marcados por las asambleas, tomas y acampes marcan el rumbo de cada conflicto. Así lo demuestran los piquetes en defensa de la salud en Neuquén y la lucha por la reapertura de la Clínica San Andrés.

El recorrido que tiene este conflicto es un ejemplo para otros sectores, incluso para la planta Transfarmaco donde los trabajadores y las trabajadoras de Just comenzarán a desempeñar sus tareas. Vale recordar que la primera medida que tomaron ante el anuncio de los despidos fue romper con el Seoca (sindicato de comercio) que desde un primer momento se colocó de la vereda de enfrente de la lucha por la reincorporación. La ocupación de las instalaciones y el acampe fueron el resultado de las asambleas, como así también la participación en diferentes movilizaciones, como la del 8 de marzo, donde las mujeres de Just estuvieron a la cabeza de la columna que movilizó de Plaza de Mayo a Congreso.

El sábado 10 de abril, la lucha de Just estuvo presente en el Plenario de la Coordinadora Sindical Clasista, donde se reunieron 2.000 trabajadores y trabajadoras de 93 gremios, mostrando una radiografía nacional de las luchas en curso. Este paso adelante que se ha logrado con el acuerdo en Just debe concretarse con firmeza para seguir afianzando los métodos de organización de la clase obrera frente al ataque de los gobiernos y la complicidad de la burocracia sindical.

¡Abajo los despidos! Vamos por la reincorporación efectiva de las y los trabajadores de Just.