Sindicales
16/6/2020
KFC roba plata de los sueldos de sus trabajadores
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Combo de Lucha.
Los atropellos de las empresas de fast food a sus trabajadores parecen no tener fin. Entre las nuevas denuncias que han circulado en estos días se encuentran las de los empleados de la cadena KFC, que denuncian enormes descuentos salariales. Los trabajadores manifiestan que la empresa no solo le ha quitado los $16.875 equivalentes a un salario mínimo y depositados por Anses -a través del programa de Asistencia al Trabajo y a la Producción (ATP)-, sino que en algunos casos los descuentos casi duplican ese monto, superando los $30.000.
Esta práctica de descuentos, ya aplicada en otras cadenas de fast food, lleva a la situación de que algunos recibos de sueldos quedan con saldo negativo, con lo que lxs trabajadores le “deben” a las empresas. Las “deudas” que tienen que saldar lxs compañerxs van desde los $5.000 -en los casos donde el local si abrió y estuvieron yendo a trabajar- hasta los 25 o 30 mil pesos, si están en licencias por ser parte del grupo de riesgo, con licencia sin goce de sueldo (ya que estos casos recibieron el ATP automáticamente) o si la tienda no abrió y todavía no fueron a trabajar.
Esto deja a lxs compañerxs en una situación desesperante, ya que se ven obligadxs a concurrir a trabajar, aunque sus familiares sean parte del grupo de riesgo, para poder empezar a descontar esa “deuda” y no tener que, en un futuro, ir a trabajar gratis para poder cancelar esa “morosidad”. Incluso, la empresa misma los aprieta con esto.
Lxs trabajadorxs de KFC no consiguen ningún tipo de respuestas por parte de la patronal ni el sindicato, solo les han enviado listas con los nombres de todxs sus compañerxs. donde figuraba toda la “deuda” que tienen que saldar a su empleador las próximas quincenas, en donde también figuran saldos más altos que lo recibido por el ATP.
ATP, terreno de robos
La “nueva modalidad” de pago viene funcionando hace dos meses (mayo y junio), pero los trabajadores no tienen respuestas claras acerca de cómo opera, ni por parte de las empresas, del sindicato o de la Anses. Por el contrario, estas siempre son confusas, para desorientar.
Lo único que saben es que en mayo, la Anses les depositó según lo que cobraron en el mes de febrero, y con un monto máximo de $16.875 para aquellos que habían percibido en febrero entre uno y dos salarios mínimos. Para quienes venían de cobrar menos de un sueldo mínimo en febrero, lo abonado en mayo fue del 50% de ese sueldo (por caso, $6.000 si venían de cobrar $12.000). En el caso de junio pasó exactamente lo mismo, pero tomando como referencia el mes de marzo, donde ya todxs tuvieron el recorte salarial del 30%.
El programa de subsidios ATP no solo supone un manotazo contra la caja jubilatoria en beneficio de las patronales, sino que resulta un terreno de maniobras por parte de estas, y en particular de las de fast foods. Empresas como Starbucks y Burger King, incluso, utilizan la plata que se ahorran -al no pagar los sueldos- para llevar adelante retiros “voluntarios” (despidos encubiertos).
Basta de abusos
Ante estas situaciones, es necesaria la intervención de lxs trabajadores, para romper con los atropellos y abusos de las patronales.
Impulsemos la organización de asambleas y medidas de lucha en cada lugar de trabajo.
Basta del robo a la caja de jubilados; que las empresas se hagan cargo del 100% de los salarios y que otorguen licencias pagas para aquellxs que convivan con personas que integran el grupo de riesgo.
Con esta perspectiva, llamamos a los trabajadores de fast food a sumarse a la agrupación Combo de Lucha y a dejar su denuncia en el relevamiento que reproducimos a continuación.