Sindicales

5/12/1996|522

La burocracia sindical con Markovic

Cuando promediaba la asamblea de los “autoconvocados”, con la presencia de dirigentes de ATE-PAMI y ATE-Capital (UPCN y UTI no asisten a estas reuniones), una trabajadora pidió explicaciones sobre un comunicado de la Mesa Intersindical de los tres gremios, que plantea textualmente “… gracias a la lucha… hemos modificado una adversa realidad. El PAMI se normaliza. El PAMI no se disuelve. El PAMI no se propone despedir con crueldad a sus empleados”. Los dirigentes de ATE balbucearon que no les constaba que el gremio hubiera firmado el comunicado.


Al día siguiente, un comunicado de prensa de la Rama PAMI de ATE, trata de demarcarse del comunicado de la Intersindical, pero se embarra aún más. Vuelve a decir “… el sentido de los logros obtenidos se debe a la lucha que han emprendido los trabajadores…”.


¿De qué logros hablan?, ¿de los retiros voluntarios anunciados? ¿de la ‘normalización’ fraudulenta? El comunicado no dice, además, una palabra sobre la Marcha Negra. ATE se suma, entonces, al intento oficial de liquidar la movilización sobre la base de informaciones falsas y de ganar tiempo para desmontar el conflicto, que Markovic habría abierto ‘impolíticamente’ en todos los frentes (jubilados, empleados, prestadores).


En la misma asamblea, un dirigente de ATE informó que venía de una reunión en la que el CTA, con De Gennaro a la cabeza, se sentó a la misma mesa con el Ministerio de Trabajo y Markovic, para discutir la ‘normalización’ del PAMI, y que llevará un proyecto propio a la próxima reunión concertada (?).


El informe desató numerosas críticas de los asambleístas. Pero una compañera, ovacionada por los presentes, pegó en el centro; denunció que el solo hecho de sentarse con Markovic era legitimar la intervención y su política…


Los gremios ven con codicia la prometida ‘normalización’ de Markovic. El precio es frenar la movilización de los trabajadores. UPCN lo hace con métodos de intimidación y hasta patoteriles. ATE, con perfidia, ‘acompaña’ al movimiento, mientras lo desalienta, no lo impulsa, confunde, o lanza comunicados vergonzantemente frenadores.


Debe señalarse que ATE no tomó una sola iniciativa propia en lo que va del conflicto. Se limitó a colocar carteles en las movilizaciones; no sacó una solicitada, no llamó a un paro, se opuso a la unificación de las acciones con los compañeros del ANSeS.