La “escuela itinerante” de la Ctera llegó el 12 de junio a la Ciudad de Santa Fe, y el 15 estará en Rosario.

 

Armada el 9 de abril entre gallos y medianoche, sin consulta ni convocatoria a los docentes, la conducción de la Ctera buscó con esta iniciativa cerrar una lucha en ascenso, que tuvo su punto más alto en la marcha federal del 22 de marzo, con alrededor de 400.000 personas en la Plaza de Mayo. 

 

La “escuela itinerante” es un encubrimiento de la política de tregua impulsada en el momento en que estaba más vigente que nunca la perspectiva de un plan de lucha con paros progresivos y la huelga general, para quebrar la política de ajuste del gobierno y avanzar en los reclamos docentes y educativos.

 

Este operativo de desguace de la lucha tuvo un episodio especial en el paro del 30 de marzo anunciado por las CTA, que Sonia Alesso arengó en Plaza de Mayo y al que finalmente le bajaron el pulgar. En Santa Fe, Amsafe Rosario con su cuerpo de delegados fue la única seccional que lo sostuvo, junto a varios gremios provinciales, enfrentando durante los días previos una virulenta campaña de carnereaje de la Celeste para garantizar que no haya ninguna medida de fuerza en la provincia.

 

Ante la represión a la dirección de la Ctera al momento de intentar instalar la “escuela itinerante”, la propia conducción de Sonia Alesso no impulsó ninguna acción en los departamentos de Santa Fe, siendo nuevamente el departamento Rosario el único de la provincia que repudió en la calle el ataque a la docencia. Aquello fue una de las tantas expresiones de la tregua de la conducción de Amsafe con el gobierno de Lifschitz, que recién convocó a una movilización provincial en la Capital a la quinta semana de conflicto, asegurándose de bajarle los decibeles para no molestar al gobierno provincial.

 

Una Ctera de espaldas a las luchas

 

La “Escuela Itinerante” de la Ctera llega a Santa Fe dándole la espalda a los conflictos aún abiertos.

 

En Santa Cruz, los docentes llevan cuatro meses de lucha, aislados, con salarios adeudados, bancando la represión y rechazando una ridícula propuesta de aumento del 3% de la mano del FPV de Alicia Kirchner.

 

En Provincia de Buenos Aires, la paritaria está completamente congelada; Vidal dice que no va a resolver el acuerdo por decreto, pero es como si lo hiciera, porque ha anunciado que depositará un 10% a cuenta de su ofrecimiento. Los jubilados, luego de un adelanto que recibieron por única vez, no han cobrado un peso y el salario docente está congelado en los valores de hace un año atrás. Por otra parte, lanzaron la amenaza de que los docentes deben recuperar los días de huelga durante el receso invernal, incluso cuando ya se ha descontado el pago de los mismos. En este cuadro, las seccionales multicolores opositoras a Baradel pararon y se movilizaron a la Casa de la provincia de Buenos Aires este viernes 9 de junio, levantando todos los reclamos de la docencia: básico de 15.000 pesos, el respeto de las escalas salariales, contra las sumas en negro y los descuentos y por el conjunto de reivindicaciones pendientes.

 

La “escuela itinerante” es la antítesis de esta orientación de organización y lucha. Busca correr el eje de los reclamos genuinos de los docentes para abocarse a la exigencia de una nueva ley de financiamiento educativo, en los mismos términos de la ya fracasada ley del 2005 –que nunca llegó al 6% del PBI para educación y que mantuvo en pie la descentralización educativa heredada de la dictadura y el menemismo. A su turno, se trata de una subordinación de las luchas obreras al operativo electoral del “volveremos” por parte del sindicalismo kirchnerista, que pretende poner en pie un “Frente Ciudadano” con los mismos que le vienen votando a Macri las leyes del ajuste.

 

Esta orientación viene generando un debate al interior de la comisión directiva de Amsafe Rosario, en la que las agrupaciones enroladas en la CTA Micheli y tributarias del FSP (Frente Social y Popular) vienen bregando por una confluencia con el sindicalismo K, y ya han deslizado la posición de que Amsafe Rosario concurra a la Escuela Itinerante, algunos “críticamente” y otros ni siquiera. A este planteo, desde Tribuna Docente le hemos opuesto la propuesta de llegar a las escuelas con una caracterización de lo que está planteado y una delimitación y denuncia de la impostura de la burocracia.

 

Ante el retroceso histórico al que el macrismo quiere someter a la educación pública, lejos de la política de tregua de la Ctera, la docencia de todo el país necesita que se retome el plan de lucha, con paros progresivos, y la perspectiva de una huelga general hasta ganar. Los sindicatos docentes combativos deben delimitarse y clarificar sobre la orientación de fondo que guía a la “Escuela Itinerante” de la Ctera, como condición para desarrollar una política de superación de estas direcciones burocráticas.

 

Desde Tribuna Docente, desenvolveremos la lucha política para que en Amsafe Rosario se exprese esta perspectiva.