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Los resultados de las elecciones del claustro de graduados en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA colocan a nuestra lista, Tribuna de Graduados por la Democratización, en el cuarto lugar con 186 votos, un 4% del total. Esta votación duplica a la obtenida en 2013, de modo que constituye un notable avance. De este modo, coronamos dos jornadas de intensa militancia, donde fortalecimos nuestro vínculo con graduados y docentes de la facultad, afiliamos compañeros al sindicato (AGD-UBA) y distribuimos el periódico. Cabe señalar que la burocracia sindical de Aduba aprovechó la ocasión para montar una mesa y promocionar falsos aumentos salariales y un convenio colectivo trucho firmado a espaldas de los docentes; frente a nuestra presencia, prefirieron desarmarla y retirarse.

En una elección donde votaron más de 4.500 graduados, Nuevo Espacio (UCR-PRO) mantuvo la representación total del claustro con un aplastante 67% de los votos. La Lista Azul (que representa a las consultoras privadas nucleadas en el Consejo Profesional) y la lista kirchnerista obtuvieron un 16% y un 11% de los votos, respectivamente, muy lejos de amenazar la hegemonía absoluta de la gestión actual de la FCE y de la UBA.

Si bien mantenemos firme nuestro histórico reclamo de eliminación del claustro de graduados, sostenemos que la intervención en el mismo es una necesidad en todas las facultades. Nuestra lista fue la única que denunció los negociados del pacto PJ-UCR-PRO que gobierna la universidad y reclamó la gratuidad de los posgrados y cursos de actualización que actualmente nutren la enorme caja de la FCE, fondos que, lejos de ser puestos al servicio del mejoramiento de la universidad pública, constituyen el botín que se disputan las distintas variantes patronales que se presentan en estas elecciones. Es importante recordar que el claustro de graduados es actualmente el único donde pueden participar los docentes interinos y los investigadores, carentes de representación en el cogobierno de la UBA.

Al calor de las luchas que se han desarrollado en la UBA en los últimos tiempos (en particular, por la aplicación del Convenio Colectivo de Trabajo de los docentes universitarios, negada por el rectorado) y de los recientes escándalos de corrupción, que incluyen la renuncia del decano Giusti en la FCE, la consolidación de una alternativa de izquierda en el claustro de graduados es un triunfo importante para avanzar en la lucha por una universidad pública, gratuita, laica y democrática.