Luego de más de un año de lucha, el delegado Daniel “Pollo” Luna –miembro de la Lista Naranja– deberá ser reincorporado a su puesto de trabajo en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) según determinó la justicia en un fallo que deja entrever la política antiobrera del gobierno.

“Declarar la nulidad del despido dispuesto por INTI, a la que condeno a reinstalar a Daniel Fernando Luna en el puesto de trabajo que ocupaba hasta el 29/01/2018”, dice el fallo, el segundo en ordenar una reinstalación definitiva de uno de los 258 despidos producidos en enero de 2018, luego de la resolución que determina que el delegado Germán Araníbar debe retomar sus tareas en el INTI y que no ha sido acatado todavía por las autoridades del instituto. El fallo del juez Raúl Horacio Ojeda dilucida una cuestión muy importante para la lucha de los trabajadores del INTI ya que remarca el carácter antisindical de los despidos. “INTI no justificó el despido de Daniel Luna, ni logró excluir la causal discriminatoria de las motivaciones de la ruptura del vínculo, lo que me lleva a concluir que la disolución del vínculo tuvo por móvil real y solapado la discriminación del actor por su actividad sindical y con el objeto de obstaculizarla”, dice la resolución. “No es relevante que el actor no haya sido formalmente el delegado, o un candidato reconocido por la demandada. Basta su actitud militante y activista, para entender que su despido vulnera derechos fundamentales consagrados en la Carta Magna. En época de crisis, cualquiera sea su causa o justificación, es cuanto más resulta necesaria la existencia de trabajadores que representen el interés de los trabajadores con su actividad sindical, para moderar el impacto de la crisis en la planta de personal". El fallo es contundente.

Prensa Obrera habló con Daniel “Pollo” Luna por el fallo que ordena su reinstalación: “En principio es una victoria de la lucha política de los trabajadores, de la junta interna y de la agrupación Naranja que continuamos con la lucha por la reincorporación de todos los delegados”, dice.

–¿Qué diferencia este fallo de otros que plantearon reincorporaciones?

–Esta resolución reconoce mi actividad sindical y política y señala que la patronal tuvo como foco de los despidos a los compañeros activistas y delegados de todos los sectores. Dice que no hay causa para los despidos e indica, a partir del testimonio de los testigos, que la patronal debía reconocer en mi persona la tarea de delegado sindical con independencia de la elección ya que había pruebas suficientes como para reconocerme como un delegado de hecho.

–La directiva del INTI no acata los fallos de reinstalación, ¿cómo ve esta situación?

–El INTI no acató todavía el primer fallo de reinstalación definitiva de Germán. Ahora estamos discutiendo una serie de iniciativas de actos y medidas de lucha para exigir la reincorporación mía y de Germán.

–Pasó un año desde su despido, ¿qué balance puede realizar?

–Arrancamos el año 2018 con todos los despidos y lo cerramos ganando la junta interna. En líneas generales, la patronal fracasó en su objetivo de despedir a toda la Naranja. El valor de haber construido una agrupación clasista nos dio el músculo para sostener esta situación de crisis.

“El fallo tiene un valor político muy importante para nosotros porque nos da la razón en cuanto a que denunciábamos un despido de características persecutorias y marca la continuidad de la lucha por las reincorporaciones”, dice Luciano Domínguez Pose, actual secretario general de la Junta Interna del instituto. “El 25 de enero realizamos un acto a un año de los despidos y la ocupación del INTI y decíamos que la lucha seguía abierta y este fallo no sólo lo demuestra, sino que significa un envión para seguir luchando por la reincorporación de todos los despedidos. Además es un golpe muy fuerte a las autoridades del INTI porque desmiente que decían que éramos ñoquis. Se trata de un punto de apoyo fundamental para la organización”.

La patronal del INTI se mostró a lo largo de su gestión como una “banda sin conocimientos científicos ni técnicos”, según caracteriza la Junta Interna del instituto, a la vez que ha sido objeto de reiteradas denuncias de desvío de fondos para beneficio de sus integrantes.

“La reposición en el puesto de trabajo deberá hacerse en las mismas condiciones vigentes a la fecha del despido, en cuanto a destino, horario, carga laboral, y remuneración (con más los aumentos que se hubieren producido por influjo convencional)”, plantea la resolución de la justicia. “Condenaré a INTI a pagar los salarios caídos desde el despido y hasta la efectiva reinstalación en el puesto”.

Se trata de una victoria muy importante para los trabajadores del instituto, que además anticipa más luchas y futuras victorias.