Sindicales

14/6/2007|996

La lucha de los pequeños productores tabacaleros

En el sur de Tucumán conviven empresas multinacionales productoras de cigarrillos, grandes acopiadoras que monopolizan la distribución del tabaco y más de un millar de pequeños y medianos productores tabacaleros, la inmensa mayoría en condiciones de miseria.


Ante el continuo despojo que sufren a manos de Massalin Particulares y la acopiadora de tabaco La Invernada, los pequeños productores con sus familias vienen realizando cortes en la Ruta 38 desde el pasado mes de abril. Los pequeños productores fueron estafados en la cosecha pasada por la acopiadora que les recibió el tabaco pero nunca les pagó. A esto tenemos que sumar que Massalin Particulares les paga un precio muy bajo por ser la única compradora fuerte de la zona. Este panorama se completa con las inundaciones, que este verano destruyeron el 50% de la producción.


Los anuncios oficiales sobre la apertura del mercado chino para el tabaco aceleraron la concentración de tierras en el sur de la provincia. Se pretende acaparar el negocio llevando a la quiebra a los pequeños productores, comprarles sus tierras y luego utilizarlos como mano de obra barata y calificada para sacar la producción para el mercado chino. Ya se anunció la instalación de una nueva tabacalera que sería manejada por una asociación de grandes productores de Salta y Tucumán.


Los cortes en la Ruta 38 no hacen más que sacar a la luz los manejos del gobierno y de los dueños de grandes extensiones de tierra. Por un lado existe un Fondo Especial del Tabaco que el gobierno utiliza arbitrariamente, y del otro están los pequeños productores arruinados. La reivindicación de los cortes es concreta: un subsidio de mil pesos por productor durante seis meses, hasta que salga el fondo especial; el pago de las deudas por parte de la acopiadora, y mejores precios.


El gobierno prometió que iba a conceder el subsidio, aunque aún no lo hizo efectivo, lo que ha caldeado los ánimos de los minifundistas. El subsidio vendría a cubrir las pérdidas que tuvieron durante las inundaciones de enero (perjuicios que, por otra parte, fueron responsabilidad del gobierno). Al no concretarse el pago, han salido a cortar la ruta nuevamente.