El 16 de mayo, casi 500 compañeros del Polo Obrero de La Matanza fueron bajo la lluvia a cortar la ruta frente a la Secretaría de Acción Social municipal por la atención a nuestros comedores y por puestos de trabajo en la obra pública local.

 

Habíamos tenido reuniones previas y los funcionarios no hacían más que bicicletearnos. Se pusieron verdaderamente nerviosos por las declaraciones del Polo Obrero en los medios locales sobre la falta de asistencia del Municipio a nuestros comedores a pesar de que se aumentó el presupuesto de Acción Social. Explicamos en radios y diarios de la zona que, como el Estado municipal usa sus fondos para armar la red clientelar, se negaba a darle la comida a los comedores populares del Polo justamente por nuestra independencia del gobierno. Llegaron a amenazar con no recibirnos por denunciarlos, o con no dejarnos retirar los materiales de limpieza para los comedores que hemos ganado en acciones de lucha previas.

 

Por todo esto, cansados de promesas y promesas, nos instalamos con nuestras ollas y nuestras banderas en la ruta, frente a la Secretaría. Dijeron que para negociar teníamos que levantar el corte. Mantuvimos el corte. Nos quisieron digitar una delegación para entrar a negociar. Obligamos a los funcionarios a venir hasta el corte en camioneta a poner la cara frente a una asamblea de todos los que cortaban la ruta. Allí los compañeros rodearon a los funcionarios, exigiendo respuestas por tanta demora en atender los reclamos. Distintas voces fueron respondiendo una por una todas sus excusas y sus negativas. Los funcionarios, visiblemente desmoralizados y frente a un corte que amenazaba con continuar toda la tarde de ser necesario, accedieron a extender inmediatamente la ayuda a los comedores del Polo, pasando la asistencia de dos a ocho comedores. El acuerdo también contempla mejorar la calidad de la asistencia, así como una atención en infraestructura para el resto de los comedores, todavía no incluidos en este acuerdo.

 

Queda mucho por delante. Vamos por el ingreso de los compañeros a la obra pública. No obstante, el Polo matancero supo cómo arrinconar a los alcahuetes del gobierno: agitación política, movilización masiva pese a los contratiempos, y firmeza en la lucha. Corte de ruta y asamblea. Aquí, como en todo el país, nos preparamos para el Congreso Nacional movilizados y en la calle.