El pasado 9 de junio una multitudinaria movilización recorrió las calles de La Rioja en reclamo de aumento salarial, pase a planta de precarizarizadxs, trabajo genuino y asistencia para comedores populares entre otros reclamos esenciales. La movilización convocada por la multisectorial ingresó a la zona de la Plaza 25 de Mayo después de las 10 horas.

Se movilizaron trabajadores de la salud, docentes, municipales y trabajadores precarizados integrantes de la Unidad Piquetera. La acción de lucha expresó una unidad de trabajadores que hizo sentir los reclamos del pueblo trabajador. Es que todo sube menos los salarios. Además, el incremento de servicios, como el de la energia eléctrica, se disocia completamente con los ingresos populares.

Cabe tener en cuenta que las y los trabajadores de la salud hace meses que vienen realizando acciones de lucha. En el caso de la docencia, una formidable acción impulsada por la autoconvocatoria puede quebrar el ajuste salarial que el gobierno y la burocracia pretenden consumar en una paritaria que deja los salarios docentes por detrás de la canasta familiar.

A los mencionados reclamos hay que sumar el de los trabajadores municipales que también se expresaron en la marcha impulsada por la multisectorial. Como se ve la convocatoria también reclamó contra el gobierno municipal de Cambiemos, demostrando que todos quienes gobiernan lo hacen con una orientación que tiene como eje el ajuste sobre salarios y jubilaciones.

La Unidad Piquetera, encabezada por el Polo Obrero, viene siendo el gran motor de la lucha contra el ajuste y de apoyo con los trabajadores estatales y privados. Por eso este 9 de junio la presencia de compañeros de los diferentes barrios fue masiva. De modo que la tenacidad de la lucha piquetera va abriendo un camino de unidad con otros sectores de trabajadores, tan necesario para poner de pie a todo el movimiento obrero contra el ajuste.

En esa perspectiva empalma la campaña por el plan de lucha y el paro general que venimos impulsando. La propuesta da en el eje de la situación política, ya que a medida que el ajuste se intensifica resulta vital reagrupar fuerzas para unir todas las luchas en curso. Esta perspectiva viene expresándose en el acampe piquetero o en la gran Marcha Federal que movilizó a 300.000 trabajadores por el país entre las jornadas provinciales y sus caravanas hacia la marcha central.

Justamente ante esa predisposición el gobierno maniobra y además empezó a echar lastre. Frente a una burocracia sindical que perdió el control de la calle, el ejecutivo de Ricardo Quintela buscó maniobrar con supuestos planteos de reuniones para atender los reclamos. Finalmente, el gobernador se reunió con la cúpula de la burocracia sindical para la foto y anunciaron que se reunían “para conversar sobre la situación actual nacional y provincial y trabajar en la cuestión salarial para que le gane a la inflación”.

También anunció adelantar $4.000 el incremento para la quincenita, y $3.000 para becas, PEM y contratados. En tanto que se difundió que se derogaría el decreto Cavero, por el cual es factible de descontarle a las y los trabajadores los días de paro. Sin embargo la medida no corre para lxs autonvocadxs, puesto que de acuerdo al planteo de Quintela, solo se incluye a quienes estén afiliadxs a sindicatos. Además, el ejecutivo hizo saber que para la docencia adelantaría a julio el “incremento salarial” pautado para agosto. Junto a eso ofrecería $2.500 no remunerativos en una sola cuota. El ánimo de la autoconvocatoria docente es el de rechazar el “ofrecimiento” e ir por más.

Mientras la bronca popular sigue su curso, el gobierno intenta maniobrar y echar lastre, en tanto que la burocracia sindical anunció la creación de una mesa de sindicatos que nuclea a conducciones cuestionadas por la base de los gremios. Se trata de un desesperado intento por evitar un desborde mayor. Es que trabajadores sin paritarias como los provinciales miran con expectativas el abierto desafío de la clase obrera impulsado por la Unidad Piquetera y la multisectorial.

Así las cosas, la tarea de la hora es fortalecer el frente único, y por lo tanto continuar el reagrupamiento de fuerzas en la multisectorial, que en los hechos actúa como deberían hacer las centrales sindicales. Es decir, sacar a la calle a la clase obrera para enfrentar el ajuste al servicio del pacto con el FMI.

En este marco, el Partido Obrero impulsa una asamblea de lucha para el próximo sábado en su local ubicado en la calle Dalmasio Vélez y Benjamin de la Vega. Impulsamos esa actividad para reforzar la lucha y la unidad para derrotar el ajuste. Ningún trabajador bajo la línea de pobreza, trabajo genuino, abajo el pacto del gobierno y la oposición derechista con el FMI. Solo lxs trabajadores podemos darle una salida a esta crisis.

https://prensaobrera.com/politicas/la-crisis-va-por-un-tubo-vayamos-por-el-paro-nacional

https://prensaobrera.com/sindicales/sutna-nuevas-medidas-de-lucha