Sindicales

10/6/2021

La situación de monotributistas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires

Necesitamos organizarnos por el pase a planta.

La escandalosa política impulsada por el gobierno de Alberto Fernández, que generaba una deuda retroactiva del 35% sobre las espaldas de los monotributistas, suscitó todo tipo de revuelo. No es menor ya que impacta fuertemente en los trabajadores más precarizados de todas las categorías, generando una deuda retroactiva a enero, incluso para quienes pagaron la totalidad del impuesto mes a mes. Representa uno de los puntos más altos de la política de ajuste fiscal que tiene como protagonistas a los trabajadores a través de impuestazos y ajustes salariales.

Si bien el gobierno fue atrás con respecto a la deuda retroactiva, producto del fuerte descontento que despertó en diversos sectores ya que representaba el punto más polémico, la cuestión colocó una vez más sobre la mesa las profundas condiciones de precarización y ajuste a las cuales el gobierno somete a diversos sectores de laburantes. Además, lo puesto en cuestión se relaciona con la posibilidad de cobrar una deuda retroactiva pero no con el aumento del impuesto en un 35%; es decir, considerablemente por encima de los aumentos paritarios que se realizaron en cuotas y teniendo en cuenta que la gran mayoría de los trabajadores por fuera de convenio no tienen establecidos los mismos aumentos.

Esto afecta de lleno a los trabajadores precarizados del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que se cuentan en casi 18.000. Sometidos a las mismas jornadas que los trabajadores bajo convenio, o incluso más producto de la inestabilidad contractual, representan el sector más precarizado. La falta de ART, licencias pagas y antigüedad se cuentan entre las condiciones laborales que pesan sobre quien no encuadran en la legislación laboral. El punto cúlmine de la paradoja es que en vez de recibir el aguinaldo reglamentario de medio término, se reciba un golpe al bolsillo de estas características.

La reforma laboral que reclaman las patronales se mira en el espejo de este fraude que se generaliza tanto en el Estado nacional como los municipios y que proveen a los gobiernos de una dotación de trabajadores con contratos basura. La reivindicación por el pase a planta de todos los trabajadores precarizados tiene una vigencia indiscutida.

Las direcciones sindicales son cómplices al no hacer eco de estos reclamos. Sutecba se coloca en un extremo al directamente no reconocer a los 18.000 monotributistas del GCBA como trabajadores, mientras que ATE brilla por su ausencia en generar instancias de lucha más allá de las proclamas. Ambos han firmado una paritaria que solo menciona el paso de solo 500 trabajadores a planta, dejando al desamparo a las grandes mayorías. Son responsables de garantizar que el impuestazo de Fernández golpee a los sectores precarizados por Larreta.

Por el contrario, desde Tribuna Municipal participamos e impulsamos la agrupación Monotribustitxs Organizadxs, que convoca a monotributistas de diversos sectores tanto freelance como en una relación de dependencia encubierta, como son los trabajadores municipales y estatales. Se impulsó desde el primer momento un petitorio virtual que ya lleva más de 80.000 firmas y pronunciamientos. Una asamblea convocada de emergencia que contó con la presencia de casi 100 trabajadores votó un plan de lucha que tuvo su primera parada en una concentración este jueves a las 11:30 horas en la Casa Rosada, por este reclamo.

Que el gobierno tenga que retroceder no es más que producto de la organización y lucha de los sectores afectados. Vamos por la anulación del aumento, el pase a planta con todas las garantías laborales y un aumento de emergencia para que no haya ningún trabajador del GCBA en la pobreza.