La guerra de guerrillas planteada por las patronales del cordón industrial de San Lorenzo contra las conquistas de los trabajadores nos van dejando una secuela de victorias y derrotas, consecuentes con las políticas adoptadas por las direcciones sindicales.

El mantenimiento de la fuente laboral con todos los obreros adentro en Papelera Andino y el recule de las patronales agroexportadoras (nacionales y multinacionales) en la aplicación de un proyecto flexibilizador, nos dicen claramente que la lucha mediante la toma de fábrica y los cortes de ruta es la herramienta que necesitamos para conseguir nuestras reivindicaciones inmediatas.

En cambio, los sindicatos burocráticos que ‘consensuaron’ con las patronales, dejaron la secuela de fábricas cerradas y desocupación (Cerámica San Lorenzo y Celulosa Argentina), lo cual nos obliga a trabajar en función de la organización de los desocupados.

Hoy tenemos la toma del frigorífico Ardeol por los 180 trabajadores que, en diciembre, confiaron en el acta-acuerdo (de ¿despidos en suspenso?) firmada por la patronal y el Ministerio de Trabajo, en la cual se habían comprometido a pagar los salarios adeudados.

El desconocimiento del acta obligó a los trabajadores a la toma del frigorífico.

Primero el corte de la Ruta 11, luega la toma de la fábrica, los ‘escraches’ a los dueños y la mesa-debate sobre el Cordobazo, obligaron al intendente de Puerto San Martín a comenzar una rueda de negociaciones hacia la reapertura. Hoy, sábado 5, esas negociaciones continúan.

La lucha de los compañeros de Ardeol debe rodearse de solidaridad para mantener la olla y la toma. Por ello planteamos un bono como Tribuna Docente para recolectar fondos en la cola de cobro de los maestros.

La lucha de los trabajadores de Ardeol debe triunfar y para ello necesitamos poner en pie un partido de trabajadores para torcerle el brazo a las patronales.