El 6 de octubre se realizaron elecciones en Uatre (trabajadores rurales) para renovar autoridades en las seccionales que integran la federación local. En cinco seccionales corrió una lista única de la burocracia. En la principal seccional, la 651, la de los empacadores, se presentaron cuatro listas: la oficial de la burocracia, dos listas auspiciadas por el gobierno (una ligada a Barrios de Pie) y una lista antiburocrática, la Lista Naranja.

Las elecciones se realizaron cuando la cosecha había concluido; la concurrencia a votar dependía en gran medida de que cada lista llevara a los trabajadores a votar. La seccional de empacadores abarca media provincia. Durante la campaña, la burocracia armó la lista de beneficiarios de los planes interzafra. El día de las elecciones se pagaba 50 pesos por voto más los consabidos bolsones; la burocracia movilizó una impresionante cantidad de vehículos. Aunque la lista oficial fue la que hizo el mayor despliegue de aparato, también hicieron lo suyos las otras dos listas burocráticas.

La Naranja hizo una campaña a pulmón que llegó a muchos trabajadores. Sobre un padrón de 3.000 trabajadores, la Naranja salió segunda con 200 votos; superando a las dos listas burocráticas de oposición. La lista de la dirección del sindicato obtuvo 600 votos.

A partir de este reagrupamiento de luchadores tenemos que encarar las próxima batallas que van a estar concentradas en la lucha por el salario.