Sindicales

25/4/2021

Las operadoras y el gobierno quieren un ajuste histórico en el Puerto de Buenos Aires

Rechacemos el acta patronal con la asamblea general y un plan de lucha de los portuarios.

Las crisis y transferencia de la operatoria portuaria de Terminal 5 está dando lugar a una ofensiva general contra los trabajadores portuarios: un acta-borrador que liquida a los efectivos, recorta 200 puestos de trabajo, desconoce la antigüedad, habilita despidos y retiros forzosos y ataca al conjunto de los portuarios.

Esta orientación que impulsa el gobierno nacional de Alberto Fernández, por medio de AGP, y todas las operadoras portuarias, viene siendo resistida por los trabajadores de base, particularmente en Terminal 5 –desde donde se protagonizó un bloque de contenedores durante 11 días- ante la parálisis total de las direcciones sindicales de la Fempinra y el Supa, quienes no han protagonizado ninguna acción de lucha y se han convertido en promotores del acta ruinosa.

Que dice el borrador de las patronales

El acta que pretenden hacer firmar las operadoras y el gobierno parte de un salto en la tercerización de los compañeros: de los 600 trabajadores conveniados, alrededor de unos 400 pasarían al régimen de “permanentes discontinuos”, bajo empresas tercerizadas y deprimiendo sus salarios y derechos laborales. Otros 200, no convencionados, serían despedidos.

Como esto implica una inyección de ¡600! tercerizados en las empresas Dompra y Gestión, esto significaría pasar a un régimen con amplia predominancia de los tercerizados sobre el total de los trabajadores portuarios: los efectivos serían la excepción, hasta la licitación 2022, donde vendrían por todos. Está claro que el modelo de T5 es para aplicarlo a todo el puerto.

A los 600 compañeros de T5 tampoco se les reconoce la antigüedad, lo cual sería recortado de sus salarios, y solo se contemplaría un tope de 10 años para el computo de… las vacaciones.

Los compromisos de pase a planta en las demás terminales acaban de ser liquidados, bajo la “expectativa” de futuras “mesas de negociación”. Todo humo, cuando las operadoras no saben ni donde estarán paradas en mayo del 2022.

El bono de $29.000 mensuales, por un año, por fuera del básico, es batido como un gancho para firmar este acuerdo ruinoso para todos. Todo “beneficio adicional que presentan las patronales, el Estado y la burocracia, saldría de los propios bolsillos de los efectivos –que serían tercerizados- y la antigüedad desconocida. Además de caducar al año, sin obligación de renovarlos. Un anzuelo para cazar algún despistado.

Estamos ante un ajuste grosero que es la antesala de un ajuste aun mayor que preparan para la licitación del 2022.

La burocracia quiere firmar, los trabajadores no

Las direcciones de la Fempinra y el Supa han mantenido reuniones con las patronales y el Estado, a espaldas de los trabajadores, en donde han negociado estos términos. Se niegan a abrir un debate general porque son conscientes de lo perjudicial y dañino de lo que estan avalando. Incluso no han expresado su solidaridad con los compañeros de T5 que recibieron notificaciones judiciales intimidatorias por el bloqueo y las acciones desarrolladas.

Los trabajadores del Puerto de Buenos Aires hoy atraviesan profundas tensiones y un descontento fuerte con la burocracia sindical de estas direcciones. No estan exentas situaciones como las de la huelga de Salud en Neuquén, donde las bases y los cuerpos delegados tiraron por la borda lo firmado por la burocracia y se lanzaron a una huelga general, que conmueve la provincia y el país.

Incluso, de firmarse este acta eso daría lugar una mayor acumulación de contradicciones y las posibilidades de ascenso de un movimiento de lucha de los tercerizados, luego de agotarse una experiencia con las direcciones de la traición, que irrumpa con un programa propio ante las paritarias y la licitación: el pase a planta permanente, todas las sumas salariales al básico, el reparto de las horas de trabajo y la defensa de los derechos del convenio.

Desde la Naranja Portuaria llamamos a luchar contra este acta ruinosa. Que no se firme nada sin ser refrendado por los trabajadores, con una asamblea general de todo el Puerto de Buenos Aires, que debe discutir un plan de lucha contra esta ofensiva patronal. Por el pase a plante de todos los portuarios, reconocimiento de los derechos adquiridos, respeto de la antigüedad, recomposición de los salarios devaluados por la inflación, abajo las causas contra los portuarios. Viva la lucha de los trabajadores.