Luego de más de un mes de negociaciones estériles con la Asociación de Televisión por Cable (ATVC), el pedido de recomposición salarial del 42% va quedando corto ante el avance inflacionario. El IPC porteño acaba de colocar en 47,1% el índice de precios acumulados en los últimos doce meses. Esto significa que aun consiguiendo el 42% en una cuota se pierde igual; sin contemplar la quita del impuesto al salario que será importante.

En este cuadro, el ofrecimiento del 33% en tres cuotas por parte de la cámara (ATVC) es una burla y de ahí es que se definió un paro nacional para este miércoles.

La agrupación La Naranja de Televisión advirtió que el paro tiene como principal limitación separar al colectivo de trabajadores de televisión precisamente en momentos donde ATA y CAPIT (Asociación de Teledifusoras Argentinas y la Cámara Argentina de Productoras Independientes de Televisión) han rechazado el pedido de adelantamiento paritario para la mitad de los trabajadores del gremio.

En vez de aprovechar y sumar a la totalidad de los compañeros de televisión a la medida de fuerza, la directiva del Satsaid quiebra al conjunto de los  trabajadores y apenas llama a realizar asambleas en las productoras y canales de aire para solidarizarse con los compañeros del convenio 223.

Esta salida improvisada intenta eludir la responsabilidad del gremio, que entrega el pedido de adelantamiento paritario para los compañeros del 131/75 mientras deja solos en el reclamo a los de las cableras cuando siempre se destacó la importancia de esta paritaria para los trabajadores de las productoras.

La Naranja pide transformar este paro y asambleas en el puntapié de un plan de lucha que incluya a todos los trabajadores de televisión con el objetivo de lograr el aumento paritario con cláusula de indexación por inflación, unificación de las paritarias, la abolición del impuesto a “las ganancias” y por salarios iniciales de las categorías más bajas iguales al costo de la canasta familiar, hoy en 20.000 pesos.