A poco más de cinco meses de realizar el último paro en reclamo de aumento salarial y por la mejora de las condiciones laborales, los trabajadores del hospital Garrahan impulsaremos una nueva jornada de huelga el próximo jueves 24 y el sábado 26. El salario no alcanza y la oferta realizada a los estatales nacionales por el gobierno de Fernández se asemeja a una burla, un chiste de mal gusto para quienes venimos afrontando la pandemia desde hace más de un año.

Si bien en el Garrahan tenemos paritaria propia, todo indica que el ofrecimiento no será otra cosa que el mismo 35% en múltiples cuotas, arreglado por las burocracias de UPCN y ATE Nacional hace poco más de un mes, lo que ha significado el rechazo y la organización de diversas Juntas Internas de nuestro sindicato. Para peor, el adelantamiento del 10% de aumento (limitadisimo pero siendo un logro directo de los paros) se vuelve ahora contra los propios trabajadores del hospital, ya que bajo este acuerdo no cobraríamos la primera cuota de esta paritaria. Es decir, si aplican la paritaria como está, el aumento sería de tan sólo un 25%, cobrándose la última cuota recién en marzo del año que viene. Un robo.

Esta rebaja salarial que el gobierno de Fernández digita como parte de un ajuste general a los trabajadores y del recorte del gasto público ordenado por el FMI, generó tanta bronca en el hospital como el discrecional pago de un incremento por área crítica a los compañeros de Sistema, poco más de $22.000. Sin dudas, los compañeros de Sistemas merecen esta suma y mucho más, pero el incremento debe darse de conjunto a todos los trabajadores ya que la devaluación salarial golpeó a todas las profesiones y puestos por igual.

Este nuevo intento de la patronal de dividir debe ser contestado por los trabajadores por medio de la organización y la lucha. Los trabajadores estatales y de salud de Neuquén dejaron una firme senda que debemos continuar. Nos enseñaron que con asambleas masivas, cortes de ruta y paro se puede romper la pauta salarial de ajuste de los gobiernos, consiguiendo un incremento del 54%, cuando originalmente les habían ofrecido un 15%.

Las compañeras del Centro Quirúrgico, tanto instrumentadoras como enfermeras, tomaron la iniciativa en esta oportunidad. Otros sectores como las salas de CIM y UCI, el laboratorio, imágenes, hemoterapia, farmacia, entre otros, seguirán el mismo camino. Es necesario unificarnos en grandes asambleas generales, donde todos los trabajadores y sectores participen en función de votar las mejores medidas de fuerza y cómo se les dará continuidad, conformando así un plan de lucha que rompa el inmovilismo que proponen las distintas burocracias sindicales.

Nuestro pliego de reclamos a refrendar y votar en la Asamblea del martes 22 es: no al 35% en cuotas, por un 50% de incremento salarial, salario Mínimo igual a la canasta familiar y reconocimiento de la insalubridad en el hospital.

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