Entre 3.000 y 4.000 trabajadores del sector nos encontramos sufriendo las consecuencias del trabajo en negro, con su secuela de inestabilidad, insegu­ridad jurídica y previsional, sin conve­nio, expuestos a jomadas y ritmos de superexplotación.

A través de un proceso de tercerización, las cada vez más grandes patrona­les del Pescado (como lo indica el ince­sante aumento de las exportaciones) han arrasado con todos las límites que impo­ne la legislación laboral a la avaricia capitalista.

Estos señores se han valido de la cooperativizaeión forzosa y fraudulen­ta para llevar adelante una maniobra deliberada de trabajo semí-esclavo, una gran evasión impositiva y llevado adelante un caso de masivo fraude la­boral en Mar del Plata.

Impuesto a la desocupación

Los empresarios gozan de la posi­bilidad de imponernos estas condicio­nes negreras amparados por la alta tasa de desocupación reinante y en la desesperación por procura? el sustento de nuestras familias. Pero aquí no termina nuestro sacrificio, porque la misma maniobra que permite a las patronales evadir su responsabilidad previsional descarga sobre nuestras espaldas la pe­sada carga del pago de la “jubilación como autónomo” (CUIT) que, suma­do al seguro y a la Obra Social, ronda los 150 pesos mensuales. Estos son los tristes y miserables fundamentos que explican el “fervor cooperativista” de las patronales.

Una baja en los precios por kg o por hora, jornadas de hasta 14hs. (de traba­jo insalubre), sin horarios fijos, pérdida absoluta de la relación laboral, última­mente muy común en el gremio.

Como se ve, las seudocooperativas, no cuentan con ninguno de los requisitos funcionales, económicos y legales que serían necesarios para el funcionamiento de auténticas coopera­tivas, objetivo nunca buscado por las patronales, sino el de contar con una precaria pantalla legal para eliminar toda la responsabilidad empresarial en garantizar la continuidad de la materia prima, agravando así la inestabilidad de nuestra fuente de trabajo y colocándo­nos en situación de sub-ocupados.

¿Y la justicia laboral?

Las reiteradas denuncias de los tra­bajadores ante todas las jurisdicciones correspondientes (Secretaria de Traba­jo, Subsecretaría, IPAC, INAC) y el masivo envío de Cartas Documento a los dueños del Pescado denunciando el fraude laboral, hacen imposible que algún funcionario desconozca esta bo­chornosa situación por la que atravie­san miles de trabajadores marplatenses, convirtiéndose en “ejemplo” de alcance nacional en materia de fraude laboral y trabajo en negro.

Solicitamos de parte de las organi­zaciones sindicales, centrales obreras y dirigentes políticos y sociales, el más enérgico pronunciamiento de repudio a la salvaje explotación que sufrimos y a levantar la exigencia del cese inmedia­to del fraude laboral y el trabajo en negro en el gremio del Pescado.

Llamamos a la prensa democrática e independiente a apoyar nuestra lucha mediante la difusión de nuestra denuncia:

Nosotros impulsamos

• Que el Estado y las Cámaras Patro­nales se hagan cargo de la deuda jubila- toria. Aportes a cargo de la patronal.
• Por el reconocimiento de una Comi­sión Obrera para inspeccionare! traba­jo en negro.
• Seguro al desocupado de 500 pesos.
• Garantía horaria de 500 pesos.
• Reparto de las horas de trabajo para reducir la desocupación.

 

Ortiz de Zarate 3537-Mar del Plata (T.E. 818273)