El pasado miércoles 24, el director del Ente Autárquico Teatro Colón emitió una resolución donde dicta la cesantía de ocho trabajadores, siete de ellos delegados de la Junta Interna y un delegado paritario. La resolución solicita a la Procuración de la Ciudad que inicie el juicio para quitarle los fueros gremiales a los siete delegados, que es lo que les permite continuar trabajando en el Teatro. El delegado paritario tiene prohibido el acceso al teatro y frenada la liquidación del sueldo. Entre los que tienen pedido de desafuero se encuentra José Piazza, delegado general de la Junta Interna y candidato a secretario general nacional por la Lista Bermellón en las pasadas elecciones de ATE. Hay 17 sumarios más, todos ellos iniciados por una huelga realizada en reclamo de aumento del 40% y apertura de paritarias, a fines del año pasado.

A la par de esto, el viernes 26 se conoció un nuevo fallo en segunda instancia, favorable al gobierno, en una causa iniciada por los trabajadores en 2009 para frenar el traslado de 278 trabajadores al “Registro de Agentes en Disponibilidad” -antesala de un relocalización o un despido. Luego de una larga lucha con paros y movilizaciones, los trabajadores habían logrado frenar en la justicia los traslados y la disolución de secciones. Todavía está por verse la forma en que el ejecutivo intentará instrumentar ese fallo.

Macri y Cristina

En estas dos medidas se manifiesta la “profundización del modelo” que busca el macrismo para su segundo mandato. Por un lado, avanzar en la política de vaciamientos y tercerización que viene llevando adelante en los sectores de cultura, salud y educación. Por el otro, el intento de avanzar con la más implacable persecución gremial. El gobierno PRO pretende servirse de los resultados electorales como un cheque en blanco para desarrollar su política derechista.

El kirchnerismo, que venía haciendo demagogia con los trabajadores del Colón, se ha llamado a silencio. Este coincide con la apertura del “diálogo” iniciado entre el gobierno de la Ciudad y el nacional, luego de la victoria de Macri. Los K buscan hacer la plancha hasta las elecciones de octubre y rehuyen a una confrontación con Macri. El Ministerio de Trabajo no ha tomado cartas en el asunto, ni realizado una sola declaración contra lo que constituye una clara violación a los derechos sindicales, a pesar de que la Junta Interna ha solicitado expresamente que lo haga. María Inés Urdapilleta, pata kirchnerista en el Directorio del Teatro Colón, no ha dicho una sola palabra.

Respuestas de los trabajadores

El viernes 26 -antes de que se conozca el fallo por los traslados-, por iniciativa de la Junta Interna, la directiva de ATE Capital convocó un plenario para tratar el tema de las cesantías. La convocatoria del plenario se explica, en parte, por la presión y las denuncias del activismo durante la campaña electoral de ATE, respecto de la inacción de su directiva. En el Colón, la lista antiburocrática Bermellón ganó por más del 90%.

El masivo plenario resolvió un paro general de la seccional para el miércoles 31, con movilización a las puertas del Teatro Colón. Quedó planteado un nuevo plenario para ver cómo continuamos en esta pelea, ya que los trabajadores perciben que es un ataque no sólo a los del Colón sino al gremio en su conjunto.

Hay que seguir con las asambleas y medidas de lucha en el Teatro e iniciar una gran campaña nacional e internacional, para evitar el desguace de la centenaria institución y por la defensa de los derechos gremiales de los trabajadores.