Sindicales
21/3/1996|486
Macri y Fiat en la pelea Menem-Cavallo

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Es un dato de la máxima importancia que el convenio FIAT-SMATA hubiera sido uno de los detonantes de la última crisis de gobierno. “Cavallo reclamó (en la reunión de gabinete, informa La Voz del Interior, 15/3) una activa participación del gobierno para hacer caer el planteo judicial y mantener la vigencia del acuerdo que lleva de la mano, entre otras cosas, la anhelada desregulación laboral”.
Confirmando a PO, el diario agrega que el convenio FIAT-SMATA “se ha convertido en un caso testigo que múltiples inversores, tanto del rubro automotriz como de otros sectores, miran con atención” (ídem).
Frente al reclamo de Cavallo, Menem, sin embargo, “fué claro en su decisión de mantener el gobierno ajeno a la disputa, en lo que se interpreta como una abstención a la espera de la decisión final de la Justicia Federal”( ídem).
La posición de Menem se explica por sí misma, pues fue él quien ‘aconsejó’ a Lorenzo Miguel recurrir a la vía judicial. Tanto Menem como Miguel actúan bajo la presión de Sevel (Macri) antiguo ‘socio’ de Fiat, que salió muy golpeado por la decisión del pulpo italiano de romper la alianza con la familia del presidente de Boca.
Pero ni Menem ni Miguel objetan el convenio FIAT-SMATA tal como es, con rebaja salarial incluida, pues en esos mismos términos había sido suscripto por la conducción de la UOM, el 23 de noviembre pasado. Según el presidente de la FIAT en Argentina, “fue firmado... ad referéndum de la opinión de los cuerpos orgánicos de la UOM por expreso pedido del secretario general del gremio” (La Nación, 16/3). El secretariado de la UOM postergó la firma final del acuerdo a instancias del grupo Macri, que tenía en disputa en ese momento la licencia de la FIAT, así como para tomarse tiempo a fin de forzar al gremio a aceptar una rebaja del 60% del salario en dos plantas fundamentales de la UOM.
Desde la homologación del convenio FIAT-SMATA, hace dos meses, el secretariado de la UOM no hizo otra cosa que llamarse a silencio y crear expectativa en la “vía judicial”. Su única divergencia con el convenio FIAT es el destino de los 20.000 dólares mensuales de ‘coima’ que ahora van al SMATA.