Sindicales

25/8/1994|426

Masiva movilización de estatales en Santa Fe

El jueves 18 miles de estatales provinciales se encontraron frente a la casa de Gobierno en Santa Fe-Capital convocados por la Intergremial (UPCN, ATE, AMSAFE, Municipales, etc.). Todos los medios periodísticos lo destacaron como “el acto más importante realizado contra el Gobierno de la Provincia”.


Esta movilización se inscribe en el ascenso reivindicativo que se vive en la provincia: masivo paro del 2 de agosto, paros de los municipales rosarinos, huelga por tiempo indeterminado de los médicos residentes de los hospitales Baigorria y Centenario, lucha contra la privatización del Banco Provincial, movilización de los docentes rosarinos, etc..


La masiva concentración (unas 8000 personas), sin embargo, fue bombeada por los propios organizadores. Desde el mismo momento de la convocatoria comenzaron un trabajo de regimentación. Por un lado las reivindicaciones no aparecieron claramente explicitadas y estuvieron enmarcadas en un planteamiento que es opuesto a una defensa consecuente de esas mismas reivindicaciones… “Queremos un estado eficiente, y la justa distribución de los recursos públicos, anteponiéndolos a nuestras propias demandas o reivindicaciones laborales”.


El otro aspecto que limitó el alcance de la movilización fue la negativa de la Intergremial a llamar a un paro provincial, dejando que cada gremio defina su forma de participación en la jornada. UPCN y ATE pararon en toda la provincia. AMSAFE solamente en la capital y el resto: municipales, Banco Provincial, etc., no pararon.


Organizada de este modo la movilización, se bloqueó, fundamentalmente, la participación rosarina que es donde más se ha desarrollado el movimiento antiburocrático y de lucha en la provincia. Los 15 colectivos que fueron de Rosario pertenecían en su mayoría a UPCN.


La regimentación de la marcha se expresó también en la prohibición a que se llevaran banderas y pancartas. Regimentación que quisieron encubrir con darle el micrófono a delegados de base. Si bien la mayoría de esos delegados ya estaban designados, en algunos casos reflejaron posiciones combativas. El sentimiento de lucha también se manifestó en los aplausos a esas intervenciones.


Fuera de los amagues, la Intergremial, por boca de Ediberto Sánchez, no presentó ningún plan de lucha concreto que le diera continuidad a la masiva movilización. Es que toda la política de la Intergremial es “consesuar” con el Gobierno la “reforma del Estado”.


La lucha de los estatales debe tener un claro programa, la exigencia de que los sindicatos se retiren de la mesa de “consenso” y el reclamo a la convocatoria de congresos y asambleas de delegados mandatados por las bases, de todos los trabajadores provinciales, donde votar un plan de lucha consecuente:


• No al traspaso de las cajas jubilatorias de la provincia. Defensa del 82%.


• Retiro a los 52 años.


• Separación de la policía del sistema previsional. Por el retiro de los gremios de la mesa de “consenso”.


• Defensa de IAPOS (obra social de la provincia) bajo gestión y control de los trabajadores.


• Contra la entrega del Banco Provincial a sus vaciadores.


• Salario de 1.000 pesos.


• Derogación de todas las ordenanzas y resoluciones que dan paso a la reforma laboral en docentes.