La mañana de este martes 26 encontró a cientos de trabajadoras y trabajadores de la salud en las calles mendocinas, o más precisamente, en la entrada a los distintos hospitales y centros de salud de la provincia –entre ellos el Carlos Pereyra, el pediátrico Notti y el Hospital Central. La recomposición salarial, el pase a planta permanente y el pago del famoso bono de 5 mil pesos comprometido por Alberto Fernández, fueron las principales consignas, junto con la provisión de elementos de bioseguridad en cantidad y calidad.

La medida había sido convocada desde hacía una semana por las y los trabajadores precarizados autoconvocados y rápidamente apoyada por el Sindicato de Trabajadores Estatales Autoconvocados Mendoza (Sitea) y la agrupación Tribuna de Salud. La acción directa ha sido la forma en que las y los precarizados conquistan mes a mes el pago de sus haberes en tiempo y forma, y crece la convicción de que extender estas medidas y sumar a más trabajadores es el camino para conquistar todos los reclamos.

La posterior convocatoria de la estatal ATE y la Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud (Ampros), sindicatos mayoritarios del sector, para el mismo día, hora y lugar (sin mencionar la convocatoria previa) es una muestra de la presión que sienten por parte de las y los prestadores, que se organizan y luchan de forma independiente, superando la parálisis que las burocracias sindicales intentan imponer.

En el caso de Ampros, la convocatoria omitió el reclamo de recomposición salarial, colocó en primer lugar la cuestión del impuesto a las ganancias y relegó al cuarto lugar “el fin de la precarización” -que no es lo mismo que el pase a planta permanente- y que es el principal motor de las asambleas. Por parte de ATE, se vocifera la posible convocatoria a un paro si el gobierno no da respuesta, pero la realidad es que hace cuatro años que ATE “no descarta medidas de acción directa”, que nunca llegan.

Es una vieja estrategia de las burocracias mostrarse “a la cabeza” de un proceso de organización que los supera o que se genera por fuera, para luego aplacar los ánimos y desmovilizar. Las asambleas deben estar alertas para desbaratar estas maniobras de quienes en los últimos cuatro años fueron más representantes del gobierno que de los trabajadores.

Fortalecer y extender las asambleas

Las asambleas van tomando cada vez más fuerza y visibilidad. Desde Tribuna de Salud nos jugamos a extender aún más este proceso que hoy se encuentra concentrado en prestadores y contratados.

Nos proponemos sumar a más sectores, como los tercerizados que reciben su salario de una empresa privada, o los residentes que bajo la excusa de la “formación” son despojados de derechos, cuando muchas veces se hacen cargo de guardias o sectores enteros. La necesidad de recomponer el salario unifica a todos los sectores, incluso los de planta permanente, al igual que la triplicación del presupuesto y la provisión de insumos.

Esta jornada fue un paso importante en este sentido y marca el camino a seguir. Vamos por la conquista de todos los reclamos. ¡La unidad hace la fuerza!