Sindicales

7/11/1996|518

Mestre no tiene respuesta para los desempleados

El pasado 31/10 se inauguró una sala de terapia intensiva para niños en el hospital de Alta Gracia, ahora hospital Arturo Illia. La fiesta de la inauguración contaría con la presen­cia del excelentísimo Chancho Mestre, motivo por el cual un centenar de compañeros pertene­cientes a la Coordinadora de Desempleados de la Provincia de Córdoba, filial Alta Gracia, realizamos una olla popular, corle de avenida y quema de gomas con el objetivo de entregarle una nota a Mestre con las cinco reivindicacio­nes de los desempleados (empadronamiento, subsidio de 500 pesos, eximición del pago de impuestos, cobertura integral de salud para los desempleados y sus familias y el boleto obrero), el reclamo de que los puestos creados con la sala de terapia intensiva sean cubiertos por compañe­ros empadronados en la Coordinadora y el recla­mo de 120 bolsones prometidos para un barrio, los cuales nunca fueron entregados.


En las ollas se hizo presente el director del hospital, candidato a intendente por la UCR, para “solidarizarse” con nosotros, pero tam­bién para pedirnos que nos retiráramos porque ellos estaban de fiesta.


En realidad, el que aguó la fiesta fue el Chancho, que por la presencia de los desocu­pados (según coincidieron todos los medios de prensa) decidió a último momento faltar a la cita. El acto nuestro fue cerrado con un cántico: “Cutral Co, Cutral Co… nos dieron el ejemplo y el Chancho se cagó”.