Sindicales

13/9/2018

Metalúrgicos de Dasa se encadenan y cortan rutas por salarios adeudados

Por un plenario regional de delegados de base que defina un plan de lucha en defensa de los puestos de trabajo y el salario.

Los metalúrgicos de Dasa, fábrica que produce para el sector agroexportador, se encadenaron días atrás en la puerta de la planta Riga, ubicada en la localidad santafecina de Firmat, en reclamo de un tendal de salarios adeudados y contra la amenaza de cierre de la planta. Y hoy, por resolución de la asamblea, procedieron a realizar cortes intermitentes en el cruce de las rutas 33 y 93.


La patronal apunta a desconocer las deudas salariales que mantiene con los obreros apelando a un recurso preventivo de crisis trucho, del que echa mano de forma tardía precisamente para no abonar lo que adeuda y con el objetivo, además, de cerrar la planta liquidando menos de la mitad de las indemnizaciones.


La empresa apela al hambre y el desgaste de los compañeros, haciendo oídos sordos a cualquier reclamo obrero y ausentándose de las audiencias del Ministerio de Trabajo, que por otra parte no ofrece ninguna perspectiva real de salida al conflicto. Las deudas de Dasa con los trabajadores alcanzan en algunos decenas de miles de pesos, empujando a tomar deudas a un colectivo obrero que además enfrenta la amenaza de perder su fuente de trabajo por el cierre total -con el que la patronal extorsiona a los compañeros.


Esta situación se viene prologando desde hace meses y parece agravarse. La empresa ofrece como “solución” liquidar la maquinaria de la fábrica para pagar las deudas salariales que devoró para sostener sus ganancias, ello mientras los obreros jamás dejaron de presentarse a trabajar. Es decir, una medida que vendría a agravar el cuadro de vaciamiento industrial que ya afecta a la localidad de Firmat.


A la crisis de Dasa debemos sumar la de la fábrica de cosechadoras Vasalli, que atraviesa una situación semejante y desató una ocupación obrera de la planta, hartos de las falsas promesas de empresarios negreros y del gobierno, que ha sido funcional a toda esta política de ajuste. Vassalli se encuentra semiparalizada y sin perspectiva de solución, de la mano de una familia que quebró la fábrica. Junto con esto están el cierre o la crisis de pequeñas industrias, donde también hay despidos o recortes salariales.


Por su parte el gobierno provincial del Frente Progresista apoyó a los empresarios vaciadores sosteniéndolos con subsidios en forma directa, aumentado el subsidio por desempleo u otorgando montos de dinero para los sueldos adeudados, sin dar una salida de fondo a la crisis industrial que raja las paredes. Está planteada la necesidad de ocupar toda fábrica que cierra o despida masivamente, exigir la estatización sin indemnización para los vaciadores y su puesta en marcha bajo control obrero -una medida de defensa elemental de la vida obrera de Firmat.


La conducción de la UOM, enrolada en el Movimiento Sindical Santafecino, tampoco ha dado una respuesta a la altura de las circunstancias, dando respuestas tardías y aislando los conflictos en una localidad pequeña que vive en buena medida de la vinculación comercial que se produce en relación a estas grandes plantas.


Los trabajadores necesitamos dar una respuesta unitaria a esta crisis que el pueblo trabajador de Firmat está pagando con sus puestos de trabajo y con atrasos y deudas en salarios y aportes patronales.


Desde la Coordinadora Sindical Clasista proponemos poner en pie un plenario regional de delegados de base de todos los sindicatos, mandatado por asambleas de planta, que delibere un plan de lucha en defensa de los puestos de trabajo y el salario, para derrotar el ajuste de Macri, el FMI y Lifschitz.