Sindicales

20/1/2000|653

Ministro de Cavallo en la Corte de De la Rúa

El ‘flamante’ secretario de Transportes del gobierno de la Alianza es Jorge Kogan, el mismo que diseñó y puso en marcha las privatizaciones de los trenes cuando Domingo Cavallo era ministro de Economía.


Kogan tiene por tarea, ahora, “revisar” cada uno de los contratos (Página 12, 16/12).


Para que no queden dudas de cómo será esta ‘revisión’, Kogan dijo que las tarifas son muy bajas. Con esto, ratificó los aumentos dispuestos a última hora por el menemismo, que no son moco de pavo. “Los aumentos de tarifa previstos para los próximos años, dependiendo del ramal, oscilan alrededor del 80 por ciento en promedio” (La Nación, 19/12).


Por ejemplo, “Metrovías, la empresa de subtes del grupo Roggio, consiguió estirar el contrato hasta el 2017 … y obtuvo un aumento de un 50% en la tarifa, que pasó primero de $ 0,50 a 0,60 y llegará a 0,75 en el 2001. También como concesionario del Ferrocarril Urquiza, Roggio obtuvo un aumento del 57% a partir del 2000, con lo que el boleto mínimo pasará de $ 0,40 a 0,55” (ídem).


A esto se agrega, ahora, que las empresas van a trasladar, a los precios el IVA al transporte de media y larga distancia, a pesar de que Kogan técnicamente considera que no deberían hacerlo, “ya que pueden compensar con el IVA que hoy pagan por algunos insumos” (Página 12, 16/12). Pero el ‘hombre’ que ejerce “la autoridad de aplicación”, inmediatamente aclaró que “en larga distancia las tarifas son libres, así que el mercado (las compañías, aclaración de PO) decidirá”. Y para que no queden dudas, agregó: “De todos modos, las tarifas están muy por debajo de los máximos autorizados por Economía” (ídem).


 


Estafa


Como el resto de las privatizaciones, la del transporte tiene su propia estafa. Esta consistió en darle la concesión al operador que reclamara el subsidio más bajo, o pagara el canon más alto y se comprometiera a la mayor inversión. A cambio del compromiso con esa inversión se estableció un cronograma de aumentos en las tarifas, de manera de ir reduciendo el subsidio, a medida que se mejorara el servicio.


La realidad es que las inversiones no pasaron de ser un dibujo. Por eso, cuando se señaló que “las empresas tienen inversiones incumplidas por más de 400 millones”, Kogan respondió: “Los concesionarios tienen problemas estructurales, no pueden pagar el canon ni invertir” (ídem).


La obsesión de Kogan por justificar un tarifazo es tan grande que los periodistas le indicaron que la población no podría pagar “aumentos del 80%”. Kogan respondió que no descarta implementar “tarifas diferenciales” (La Nación, 19/12).


Tarifas diferenciales significa servicios diferenciales. Es decir, trenes o vagones de primera, otros de segunda y otros de tercera. Cada uno viajará según la tarifa que pague. Y esta gente “progresista” dice que se terminó la lucha de clases.


 


El PO plantea:


  • Anulación de los aumentos de tarifas.
  • Anulación de las concesiones y privatizaciones.
  • Por un plan único de transportes bajo control de los trabajadores.