Gerardo Morales, en función de desactivar la lucha del pueblo jujeño, avanzó en descuentos salariales sobre los maestros agremiados en Adep. En la misma línea, no le liquidó los sueldos a los empleados municipales en Abra Pampa y La Quiaca, donde hay cortes de ruta. Se trata de un nuevo avasallamiento por parte del gobernador al legítimo derecho a huelga de los trabajadores, mientras continúa sin resolver sus reclamos.

Los descuentos por días de paro llegan hasta $90.000. Semejante amedrentamiento persigue el objetivo de que los docentes y municipales de Jujuy agachen la cabeza frente a los salarios de pobreza y una reforma constitucional que ataca sus derechos laborales y criminaliza la protesta.

Como no pudo doblegar la lucha docente mediante la represión y el encarcelamiento de activistas, Morales ahora apela a los descuentos salariales para desgastar la huelga, que ya lleva más de un mes en Jujuy, con permanencia frente al Ministerio de Educación y movilizaciones en varios puntos de la provincia. La misma ha empalmado con la rebelión de todo el pueblo jujeño contra la reforma reaccionaria, aprobada con los votos de la UCR y el PJ.

Como respuesta a los brutales descuentos, el jueves 13 de julio habrá paro de Cedems, sindicato recuperado que agrupa a los docentes de enseñanza media y superior, y también del Seom, que nuclea a los trabajadores municipales. Por su parte, el paro de Adep continúa hasta el jueves, fecha en la que abrirá la nueva paritaria.

Seguimos impulsando asambleas por localidad entre trabajadores ocupados y desocupados para reforzar la lucha, como las que ya se realizaron en Caimancito, Monterrico, Alto Comedero. Abajo la reforma, arriba los salarios.

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