Sindicales

18/8/2022

Neuquén: encuentro de trabajadoras/es ocupadas/os y desocupadas/os

El sábado 20/8 desde las 10 horas.

Corresponsal

Convocado por las seccionales opositoras de Aten (Capital y Plottier) con mandato de asambleas, Picun Leufú y San Patricio del Chañar, el sindicato ceramista, los “elefantes” de salud integrantes de la lista Multicolor en la CTA Autónoma y organizaciones piqueteras como el Polo Obrero, FOL y otros, se realizará este sábado 20 de agosto un encuentro de trabajadoras/es ocupadas/os y desocupadas/os en el sum del Centro Provincial de Enseñanza Media (Cpem) 48.

Este encuentro viene precedido de un largo debate y difusión en la base. Y viene a llenar un vacío de instancias de deliberación colectiva de las y los trabajadores en general. Desde el vamos parte de la concepción muy positiva de considerar a las/os trabajadores desocupados como parte de la clase obrera misma, y no como “excluidos del sistema”.

La lucha de las organizaciones piqueteras está absolutamente ligada a la lucha sindical por los salarios, al pelear por establecer un piso que permita suplir las necesidades básicas, cuando las patronales y el Estado promueven su degradación vía inflación y paritarias a la baja. Es decir, hay un completo entrelazamiento entre la lucha de ambos sectores. Pero además, y esto es un ejemplo de calidad, las organizaciones de trabajadoras/es desocupados han apoyado todas y cada una de las luchas contra los “lockout” patronales y los despidos, poniendo en alto la unidad y la solidaridad de la clase obrera.

Una unidad que se puso de manifiesto este 17 de agosto en el marco de la jornada nacional convocada por el Plenario del Sindicalismo Combativo. Un contraste sin duda con la política de los “gordos” locales, tanto la CGT como la CTA de Yasky. Esta última tiene en Neuquén al sindicato Aten y al ATE de la Verde-Blanca como sus máximas expresiones. Y aunque el yaskismo se sumó en Buenos Aires a la movilización de la CGT en apoyo al gobierno, en esta provincia no emitieron ni un comunicado, ni siquiera se pronunciaron. De allí la importancia política de la convocatoria de las seccionales opositoras para la jornada del 17 de agosto y, a renglón seguido, la realización de este encuentro del sábado 20. Es en esta perspectiva es que hay que valorarlo.

La perspectiva del encuentro

Las organizaciones sindicales y piqueteras convocantes presidirán la mesa y habrá un orador por cada una de ellas. Luego se recibirán los saludos de las luchas en curso y se pasará a sesionar en comisiones. El temario común a ellas, además de la situación política, incluye puntos específicos como la participación en el Encuentro Nacional de Mujeres de octubre, respecto al cual los sindicatos que años anteriores han girado y financiado micros, mantienen un absoluto silencio.

Lo mismo la campaña por las causas penales abiertas contra los luchadores, que involucran a decenas de trabajadoras/es de la salud, más de 10 docentes y decenas de compañeras/os del Polo Obrero, incluyendo a César Parra, dirigente del Partido Obrero y el Polo. Respecto a estas causas, por ejemplo, la dirección baradelista de Aten no se ha pronunciado. Solo se conoce la visita asidua del secretario general, Marcelo Guagliardo, a Chubut para expresar el rechazo a la imputación y condena del dirigente de la CTA de aquella provincia.

El salario, el ajuste previsional y las distintas reformas laborales serán parte de las deliberaciones, así como la situación de ahogo tecnológico y financiero (tarifazos, dolarización de materias primas, etc.) al que son sometidas las cooperativas ceramistas.

Sin duda el encuentro decidirá acciones comunes en adelante. Lo cual apunta a un factor de reagrupamiento de sectores en lucha y la defensa de las conquistas obreras, en una provincia donde el día de hoy organizaciones piqueteras se han movilizado multitudinariamente para exigir que el gobierno cumpla con la apertura de 150 puestos de trabajo conquistados y que dilata hace meses. También hoy trabajadores de enfermería del Hospital Bouquet Roldan, que habían conquistado las 6 horas, están en paro y piquete para que el gobierno no anule esa jornada reducida. Razones sobran para organizarse y luchar. Aunque las burocracias sindicales oficien de muro de contención en defensa del ajuste del FMI y los gobiernos.