El Sindicato de Empleados Judiciales de Neuquén (Sejun), con su Secretario General Claudio Salazar a la cabeza (Lista Azul), asistió el pasado 23/2 a la mesa de negociación salarial ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ). Luego de esa fecha, el derrotero de la orientación de la dirección del gremio estuvo signado por una interminable cantidad de “cuartos intermedios”, un mecanismo para dilatar las negociaciones.

Así fue que en el marco de la Jornada Nacional Intersindical de Lucha, convocada por la FJA, desde Sejun se dispuso un cuarto intermedio para el lunes 26/2 a las 10 horas, día en el que se convocó a un retiro provincial y a una concentración en las puertas del TSJ para Neuquén Capital. Esta actividad careció de movilización y también de una denuncia de la inacción de las centrales de trabajadores (CTA-A, CTA-T, CGT), que brillan por su ausencia; mucho menos se les exigió un paro nacional. De esta ultima convocatoria resultó otro cuarto intermedio para el lunes 04/3.  Y la convocatoria a asamblea presencial por circunscripción desde la directiva para el viernes 01/3, la cual nuevamente no obtuvo respuestas desde el TSJ.

Desde la conducción se informó al conjunto de los trabajadores que “cuando tenga una propuesta formal del TS se convocará a plenario provincial”, es decir, espera una propuesta de la patronal sin debatir y votar un plan de lucha. Dentro de las exigencias del gremio está la actualización por inflación sin reclamar que sea mensual. Este reclamo es vital a la luz del Rodrigazo en marcha, del plan motosierra de Milei contra los trabajadores, de los tarifazos y decretazos antiobreros y de las reformas reaccionarias (laboral, previsional) que tiene en carpeta el gobierno.

La línea de Milei es acatada por el gobierno provincial de Rolando Figueroa, que también por decreto (79/24) incrementó los aportes personales (asistenciales y previsionales), afectando de forma inmediata y negativa (en 6 puntos) los salarios de los trabajadores estatales neuquinos en el mes de febrero. Sobre este robo al salario, las direcciones del Frente Sindical solo se limitaron a presentar un recurso administrativo, sin ninguna medida de lucha.

Ante el cuadro de dilaciones de la dirección, las y los trabajadores hicieron llegar a la conducción, en distintas asambleas de base, los reclamos imperantes: el llamado urgente a elección de delegados y delegadas, la anulación del decreto que modifica los aportes de Issn, la sobrecarga laboral, la falta de personal, las problemáticas edilicias, el hacinamiento del personal, las continuas situaciones de violencia laboral, la pérdida de poder adquisitivo, la falta de llamado a concurso y capacitación constante obligatoria por parte de la patronal y las irregularidades en los escasos concursos de ingreso y ascenso de los trabajadores del Poder Judicial.

También se puso de manifiesto, por parte de las bases, la exigencia al llamado de asamblea provincial para la próxima semana y la importancia de exigir un paro activo de 24 horas este 8M –Día Internacional de la Mujer Trabajadora–, con participación en las actividades, sin concurrencia a los lugares de trabajo, pero no solo de las mujeres, sino del conjunto de trabajadores. Movilizados en las calles, las trabajadoras y los trabajadores, codo a codo, tienen la tarea de poner en pie un plan de lucha en unidad de acción con todos los sectores de ocupados y desocupados para derrotar el ajuste de los gobiernos que en complicidad con las burocracias sindicales intentan dividirlos y contenerlos.

Por último, este miércoles 6 de marzo se dispuso, desde la directiva de Sejun, un paro provincial de 24 hs para el interior de la provincia y un retiro a las 9:30 horas para la Capital neuquina, con concentración, asamblea y movilización al TSJ.

Las y los trabajadores judiciales tenemos que seguir el ejemplo de las y los compañeros docentes. Es que las y los trabajadores de la educación nucleados en ATEN, en asambleas arrancadas por las bases, han logrado definir el rechazo a una propuesta de iguales características, desarrollando un plan de lucha progresivo.

En este escenario es imperioso impulsar acciones unificadas con el resto de trabajadores estatales, como así también con los sectores de trabajadores precarizados o desocupados, para fortalecer la lucha por los salarios y derrotar el ajuste de Milei, el FMI y los gobiernos provinciales.

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