Esta semana, la política de vaciamiento de la fábrica quedó completamente ratificada, como consecuencia de una “visita” de un grupo de legisladores a la jueza que interviene en la causa (Norma Beatriz Di Noto). La reunión confirmó la caracterización de que el grupo al cual le entregaría la fábrica por chaucha y palito, tiene como objetivo un negocio inmobiliario, y no proseguir con la producción. El camino judicial va por vía muerta: la jueza está a muerte con el grupo especulador.

Este hecho y la participación activa de los compañeros en el proyecto de ley de expropiación y gestión obrera de su fábrica, presentado en la Legislatura, así como antes, en el Acampe, en Plaza de Mayo, fue profundizando la lucha. “O nos movilizamos por la expropiación o nos jodemos”, es la conclusión.

Es así que a la mañana siguiente de recibir la información de los resultados de la visita de los legisladores a la jueza, un grupo de obreros de la fábrica fue a la puerta del juzgado con su bandera y le hizo un escrache a la jueza, volanteando y pegando carteles reclamando que la fábrica es de los obreros. Ahora, los compañeros están organizando una movilización para el miércoles 21 de agosto a las 13 horas desde el Obelisco a la Legislatura por la expropiación de la fábrica, y se han convertido en importantes difusores y organizadores al Encuentro de Fábricas Tomadas del 24 –del cual son anfitriones–: a cuanto grupo de trabajadores se les acerca, les dicen: “Vengan el 24, para que vean de nuestra experiencia y de otras, cómo se hace para tomar la fábrica”.