El Ejecutivo nacional, de la mano del ministro de Justicia, Cuneo Libarona, hizo trascender en las últimas horas que, a fines de diciembre, el Ministerio daría de baja el vínculo que Justicia mantiene con la Asociación de Concesionarias de la República Argentina (Acara); un ente por el cual el Ministerio canaliza la relación laboral de unos 3.000 trabajadores, casi el 50% de su planta actual. 

Se trata de uno de los mayores ataques a las condiciones de trabajo y contratación que se haya conocido en el Ministerio, toda vez que el fin de la relación laboral que Acara mantiene con los trabajadores implica, por un lado el despido masivo y extorsivo de aquellos trabajadores que tienen este tipo de contratación (vía LCT) y la rebaja salarial para todo el resto del personal contratado con planta transitoria y planta permanente que verá reducido dramáticamente su salario al eliminarse el incentivo, una suma en negro que es parte del salario regular y permanente de los trabajadores. Este ataque se da en el marco del congelamiento de las paritarias estatales y de despidos masivos en todo el resto del Estado, mayoritariamente contratados bajo la modalidad de artículo 9. 

Este tipo de contrataciones con entes cooperadores (Acara y CCA) existen en el Ministerio hace más de tres décadas, desde la presidencia de Raúl Alfonsín, y se mantuvieron durante todos los sucesivos gobiernos nacionales. La última vez que se intentó desactivar fue en 2018, bajo el gobierno de Macri, pero finalmente no se realizó. Si bien Acara ha funcionado como una caja discrecional para las gestiones de turno, nada indicaría que esto no continuará siendo así, porque no se elimina el negocio del Ministerio con Acara ni las partidas discrecionales, sino que se pone fin a la relación laboral existente entre Acara y los trabajadores estatales, dejando intacto el negocio de los patentamientos de los vehículos de Acara, mientras se deja a miles de familias en la calle. 

Estamos frente a un ataque sin precedentes del ministro y sus voceros, entre ellos Sebastián Amerio (que cuenta con el apoyo de Caputo), a todo el personal del ministerio: 3.000 trabajadores bajo contratos Acara ven peligrar su puesto de trabajo y el resto de los trabajadores que reciben “incentivos” en negro verán recortado su salario a la mitad. Por si fuera poco, en este marco de incertidumbre y angustia laboral, hay 21 nuevos despidos en la Secretaría de Derechos Humanos y más de 100 en todo el ministerio. El martes falleció un compañero trabajador de la Dirección de Asuntos Jurídicos que, aunque intentaron reanimarlo con un desfibrilador, los instrumentales no funcionaban por falta de mantenimiento. 

¿Cómo seguir?

En las últimas horas, voceros del gobierno nacional han dejado trascender que se estaría especulando/analizando la incorporación de una parte ínfima de las y los trabajadores al ´sistema público´ ofreciéndoles contratos bajo modalidad de artículo 9, perdiendo así la relativa estabilidad laboral existente y pasando a un contrato mucho más flexible, precarizador y sin estabilidad laboral. En los últimos meses, el gobierno de Milei despidió a más de 30 mil trabajadores contratados bajo esta modalidad en todo el Estado Nacional. 

En este contexto de ataque directo a nuestras condiciones de trabajo y de vida, las y los trabajadores tenemos que enfrentar esta situación sin caer en la desesperación y la incertidumbre y confiando en la organización de las y los trabajadores. Se vuelve indispensable debatir y poner en pie un plan de lucha que marque una perspectiva concreta: ni despidos extorsivos, ni rebaja salarial y por el pase a planta permanente, una consigna olvidada por los gremios durante décadas, pero más vigente que nunca. Las y los trabajadores no podemos ni debemos renunciar a nuestras condiciones de trabajo, hay que organizarse por el pase a planta permanente sin reducción de salario, para todos las y los trabajadores, independientemente de la forma actual de contratación. 

Con estos anuncios, el gobierno nacional ha dado un paso más para pasar el plan motosierra sobre las y los trabajadores del ministerio. Se impone entonces la lucha conjunta de todos los trabajadores del ministerio, sin distinción de afiliación y no afiliados, para la defensa de todos los puestos de trabajo y por el pase a planta permanente. 

Trabajadores aeronáuticos concentran en el Congreso contra la privatización de Aerolíneas Argentinas

También reclaman incremento salarial. –

prensaobrera.com