Sindicales

1/12/1994|433

Otro fracaso del “zanolismo” del Mas

El Movimiento al Socialismo jugó un papel objetivamente pro-Zanola en las elecciones bancarias y llevó a sus partidarios a un estruendoso fracaso. Caracterizando que la Celeste de Zanola y la 94 de la oposición “son lo mismo”, llamó a “no votar”, postura que objetivamente tendía a debilitar el voto opositor y favorecía a Zanola. Enfatizaron en la crítica los errores (reales) programáticos y metodológicos del CTA, que la Naranja y el PO desarrollaron antes y más profundamente, como una justificación de su incapacidad para ubicarse en el campo correcto, que era el campo de la lucha antizanolista. Con el mismo razonamiento, en el plebiscito de la Provincia de Buenos Aires llamaron a abstenerse, considerando que votar NO era “lo mismo” que votar SI, porque en el primer campo estaban la UCR y el Frente Grande. Perdieron de vista que lo fundamental, en ese caso, no eran los rasgos comunes de oficialistas y opositores, sino la derrota de Duhalde, que es el gobierno. Le hicieron el juego al oficialismo.


En el gremio bancario, el “zanolismo” del Mas no es novedoso. Sus “coincidencias” tácticas no son de esta elección. En grandes luchas del pasado y en más recientes parodias, como el chichoneo con Juan José, en las farsas burocráticas de los “camisetazos”. Que no corrigen los errores y son zanolistas reincidentes, quedó demostrado por un volante que difundieron en esta campaña llamando a “no votar”, firmado por sus simpatizantes pero también por el sello “Núcleo Opositor” (N.O.). El N.O. son tres (y sólo tres) ñoquis de la Interna del Credit Lyonnais, que fracasaron en el intento de formar una tercera lista para dividir el voto opositor. Entonces, financiados por suculentos recursos de la Bancaria, hicieron campaña por la abstención (incluyendo pasacalles, autos con sonido y personas contratadas para repartir volantes). Lo que viene a demostrar que el zanolismo del Mas no es sólo político, sino bastante “carnal”.


Pero, además, Claros y Mera llevaron a sus compañeros al bochorno. En el Banco Nación, donde concentran a la mayoría de sus adherentes, votaron 1.000 bancarios, unas de las más altas concurrencias, y votos en blanco hubo … 14 (!). En el Shaw, la 94 sacó más del doble de los votos que el zanolismo, el que votado por el personal jerárquico exclusivamente. El único voto en blanco fue del único simpatizante del Mas. En el Mayo, dirigido por el Mas, ganó Zanola.


La descomposición del partido que compartió cartel con todas las burocracias y reventó ATSA Capital, de la mano del ubaldinismo y con el programa de los 26 puntos de la CGT, se manifiesta con los síntomas de una grave enfermedad neurológica, Parálisis General Progresiva.