En estos momentos se está realizando en todo el país el paro de los trabajadores de las plataformas de reparto (Uber Eats, Rappi, Glovo y Pedidos Ya), que comenzó a las 10 h y se extenderá hasta las 16 h. Los repartidores (o riders) se encuentran concentrados en algunas ciudades como La Plata, Mar del Plata y Rosario; y en la Ciudad de Buenos Aires se encuentran movilizados en caravana desde el Obelisco hasta el Ministerio de Trabajo, donde llevaran sus reclamos. En horas de la tarde realizaran una conferencia de prensa para los medios.

Los reclamos que presiden la jornada, y que ya fueron manifestados el pasado 22 de abril cuando los riders adhirieron al paro internacional de trabajadores de las apps de reparto, puede resumirse en el aumento del 100% en el pago que se les realiza por cada envío; la cobertura del material y los insumos sanitarios por parte de las empresas y el establecimiento de lugares de descanso e higienización para los trabajadores. Los trabajadores denuncian que  la falta de regulación de la actividad los deja desguarecidos ante las patronales, sin cobertura médica, ART, aportes y otros beneficios.

La medida del día de hoy es impulsada desde la propia base de los trabajadores y fue rechazada por el conjunto de los sindicatos (Asimm, Sucmra, Acti y APP), que mantienen un silencio cómplice con las patronales de reparto, y se han negado sistemáticamente a organizar las reivindicaciones y la lucha de los trabajadores. En este sentido se destaca el impulso de los riders organizados en la Agrupación de Trabajadores de Reparto (ATR) y Glovers Unidos Argentina, desde donde se impulsaron asambleas virtuales para votar esta medida de acción.

Esta acción también es precedida por otras medidas preparatorias tomadas por los trabajadores. Es lo que ocurrió ayer por la noche en la ciudad de Córdoba, donde una concentración pacífica de rides fue reprimida por la policía de la provincia.

Los repartidores de las apps son uno de los sectores más flexibilizados y expuestos ante la crisis actual. Gran parte de la circulación comercial reposa en las precarias condiciones en las que desarrollan su tarea: su actividad se dispuesto de carácter esencial solo para satisfacer los intereses de los empresarios y mantener en pie algún nivel de intercambio comercial; sin embargo, no se les reconoce ningún derecho laboral ni protección, y de escoger no salir a la calle se ven privados del único ingreso económico con el que cuentan para su subsistencia.

Estas condiciones gravosas han llevado que a la muerte de trabajadores, como es el caso de Emma y Franco, quienes fueron víctimas fatales de siniestros ocurridos bajo su jornada laboral. Pero, aun así las patronales son se hacen cargo de estas circunstancias y el gobierno les permite operar como si nada hubiera ocurrido.

Desde PrensaObrera.com iremos siguiendo y actualizando el desarrollo de la jornada de lucha de los repartidores de las apps durante el día, cubriendo la extensión de un movimiento que va creciendo día a día.