La reapertura de las paritarias en la UTA entró en zona de definiciones a partir del inminente vencimiento del plazo de la conciliación obligatoria, la falta de respuesta de las patronales y del Ministerio de Transporte al reclamo de aumento y la convocatoria a un paro nacional de 24 horas para el martes 13/06 por parte del gremio, condicionado al resultado de la reunión convocada el día previo, atado pura y exclusivamente a que Transporte aumente el subsidio a las patronales.

El ministerio -y el gobierno- dilatan al máximo una resolución. Crisis económica y ajuste mediante, pretenden pagar la menor cuenta posible. Su política es el tarifazo en el transporte -y en todos los servicios públicos-. Habilitaron a las patronales un 40% de aumento tarifario en el primer bimestre del año y tarifas indexadas que se ajustan por inflación todos los meses. Discuten los ritmos del ajuste, que incluye también el ajuste salarial. ¿Qué hará finalmente Transporte en este marco? ¿Alcanzará para conformar a las patronales y desactivar el paro convocado?

Los dirigentes de UTA vienen de aceptar un 29,5% de aumento semestral sosteniendo el techo salarial planteado inicialmente por las patronales y el gobierno. La recomposición salarial adicional que solicita la burocracia sindical es de $320 mil de básico conformado inicial al mes de junio –256 mil neto para los choferes y 220 mil para técnica-, y plantean acordar por tres meses más, hasta septiembre, llevando el básico conformado inicial de bolsillo para el chofer a $331 mil (15% menos para Técnica).

La cuestión central es que atan el pedido salarial al de subsidios, es decir, están completamente alineados con los monopolios del transporte en su reclamo de compensaciones tarifarias. El resultado de esta orientación, que coloca a los trabajadores a la rastra de las patronales y el gobierno, no puede ser otro que un mayor hundimiento del salario.

En este cuadro de crisis y pujas por el subsidio está la convocatoria al paro nacional de 24 hs. En la base del gremio hay conciencia de que la burocracia sindical va por el reclamo empresario, y no sólo eso, hay una fuerte desconfianza con que terminen dejando sin efecto la medida de fuerza como tantas otras veces. Sin embargo, aún no termina de tallar un planteo que ponga el centro efectivamente en el salario. Por el lado de la burocracia sindical “opositora” (Bustinduy), aliada de DOTA, hay silencio de radio frente a la paritaria y la convocatoria al paro nacional (¿irán a carnerearlo?)

El eje actual del planteo de la Naranja Clasista de UTA es el paro activo nacional. Asambleas en todas las líneas. Básico conformado de bolsillo a junio de $400.000, con cláusula de ajuste salarial mensual y 10% de incremento sobre inflación, al finalizar el plazo de vigencia de la paritaria. Efectiva recuperación salarial. Equiparación de choferes y técnica.

Necesitamos una intervención de los choferes con una política independiente para ganar esta pulseada por el salario.

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