El martes 13 se realizó el plenario de delegados de la Federación Gráfica Bonaerense convocado para discutir la reapertura de paritarias 2022. El informe de la directiva del sindicato dio cuenta de una negociación trabada. Desde la mesa del plenario se propuso realizar “asambleas en los talleres de una hora o las acciones que se puedan en los talleres” el miércoles 14, día de reunión con la cámara empresaria. Las intervenciones de los delegados expresaron el descontento reinante en la base y plantearon, en línea con el mandato de asamblea llevado por los delegados de Morvillo, la necesidad de movilizar el gremio.

En lo que va del año, la paritaria gráfica alcanza el 86% de aumento frente a una inflación proyectada por encima del 100% (el porcentaje mayor si se toma interanual desde abril, período de vigencia del aumento) y sobre salarios de pobreza en la totalidad de la escala salarial. El pedido actual es anexar un 25% para llegar al 111%. La cámara ofrece un 10% en tres cuotas a partir de enero.

La directiva no convocó plenarios previos ni impulsó asambleas en los talleres para recoger un mandato y llevar a la mesa de negociación. La convocatoria tardía a este plenario se debe a una posición firme de las patronales que no cierra en los talleres bajo ningún aspecto y es una potencial crisis en la base del oficialismo.

La Comisión Interna de Morvillo, fiel a su tradición democrática y combativa, fue la única que presentó en el plenario un mandato de asamblea superando la dificultad que significó la notificación del plenario a último momento.

El mandato incluyó el 25% en una sola cuota, sin cláusulas de absorción y una cláusula que garantice un porcentaje superior a la inflación al finalizar el período de vigencia del acuerdo. Para ello y para quebrar la postura patronal se propuso movilizar el día de la reunión, además de las asambleas planteadas, y garantizar con presencia en los talleres donde la relación de fuerzas es desfavorable a los trabajadores, la realización de las asambleas. Se propuso, además, la convocatoria a un nuevo plenario el próximo viernes para hacer un balance de la jornada y de las negociaciones y ver cómo continuar la lucha.

Las intervenciones del resto de los delegados expresaron el malestar de la base por el atraso salarial y por las condiciones generales del gremio. El debate incluyó, entre otras propuestas, la realización de un paro de gremio, una movilización, piquetes a los grandes talleres que encabezan las negociaciones.

La resolución final no fue tan lejos, se limitó a la realización de asambleas de una hora por turno en los talleres el miércoles. La mesa del plenario rechazó votar una nueva convocatoria para el viernes, argumentando que esa era facultad de la directiva y no de los delegados presentes. Si las patronales no mejoran la oferta la mesa planteó evaluar las medidas surgidas en el debate.

Está abierto un proceso de deliberación en el gremio. La directiva remarcó varias veces la necesidad de cerrar el acuerdo rápido. No se descarta que una pequeña variación del porcentaje, aunque quede lejos del 25% reclamado, sea argumento para cerrar las paritarias.

Desde la Lista Naranja Gráfica impulsamos la deliberación en los talleres y en el cuerpo de delegados para evitar cualquier maniobra que apure una negociación y termine siendo a la baja, llamamos a defender en unidad el reclamo del 25% movilizando la base del gremio.

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