Trabajadoras y trabajadores de Terminal Puerto Rosario (TPR) se encuentran en una dura pelea contra esta empresa multimillonaria, comandada por la chilena Ultramar y la vaciadora y estafadora Vicentin. Los trabajadores venían peleando por una recomposición salarial, a lo que la patronal de un día para el otro rompió toda negociación y arremetió con decenas de despidos.

Primero fueron 23, pero luego los telegramas ascendieron a 70. Los trabajadores, con sus delegados combativos a la cabeza, respondieron con un paro total y bloqueo de los portones. La empresa intentó operar a pesar del paro, y los trabajadores replicaron con un duro piquete bloqueando todos los accesos e impidiendo que se mueva ni un solo cargamento. Ahora la patronal extorsiona amenazando con cerrar las persianas y dejar a los 600 trabajadores todos en la calle.

Como decía uno de sus trabajadores a Prensa Obrera, “esta empresa factura millones y millones todos los días. Y no en pesos, todo en dólares. Pero no quieren darnos un aumento de salario como corresponde. Ni hablemos de los negocios oscuros que manejan, por estos puertos sale cualquier cosa”, en alusión a las reiteradas denuncias de contrabando y tráfico de drogas en las cuales está involucrada la concesionaria TPR y el grupo Vicentín.

Otro trabajador nos comentó el nivel de inseguridad laboral que se vive ahí dentro: “El trabajador portuario sabe a qué hora entra al puerto, pero no sabe si vuelve a su casa. Hemos perdido a muchos compañeros, por accidente laborales, y también en la pandemia, que nos hicieron laburar a pesar de todo”.

Estas patronales, vaciadoras y desfalcadores como Vicentin o Ultramar, controlan el comercio exterior del país, facturan millones de dólares a diario y pretenden imponer su prepotencia patronal contra sus trabajadores. Los portuarios siguen firmes, hasta reincorporar a todos los despedidos. Desde el Polo Obrero y el Partido Obrero, nos hicimos presentes para dar nuestro apoyo y solidaridad. Tienen todo nuestro apoyo en esta importante lucha.