Piquetazo Nacional

 

Entre Navidad y Año Nuevo, el 27 de diciembre, el movimiento piquetero volvió a las rutas y a las calles en la mayoría de las provincias del país. En Córdoba, dos días después, salió a reclamar contra el boletazo de Juez, que llevó el transporte en esa ciudad a 1,20 pesos.

 

En el Puente Saavedra derrotamos el intento policial de impedir el corte.

 

El disparador de la medida fue el reclamo del aguinaldo. El piquetazo enfrentó de este modo el pago de los 10.000 millones de dólares “a costa del hambre del pueblo”. El “piquetazo” fue un golpe a la tregua de las centrales obreras, escandalosamente alineadas con el pago al Fondo y la negativa al aumento del salario mínimo y las jubilaciones.

 

El piquetazo se sumó también a las grandes luchas del momento, aeronáuticos, telefónicos, tercerizados de Metrovías, al denunciar el congelamiento de los planes sociales frente al brutal encarecimiento de los productos de primera necesidad, en particular ante las fiestas. Con tercerizados de Metrovías se produjo una gran confraternización frente al Ministerio de Trabajo, compartimos horas y horas de piquete apoyando una de las grandes luchas contra la precarización laboral.

 

Precisamente en el Ministerio, el Bloque Piquetero Nacional hizo cabecera con la presentación de paritarias que elaboraron los abogados de la Asociación de Profesionales en Lucha del PO. La cuestión de las paritarias para los desocupados, nos permitió desenvolver en la jornada todo un programa de unidad de clase y de salida a la cuestión de la desocupación. En sintonía con los telefónicos que lograron la reducción horaria, creando para el próximo año centenares de nuevos puestos de trabajo, como también los crearán los tercerizados de Metrovías o los telefónicos de Atento si logran una victoria de incorporación integral a sus respectivos convenios.

 

Cientos de miles de trabajadores desocupados no son representados por los sindicatos. Exigimos que el Estado-patrón asuma la responsabilidad del patròn ante los 1,6 millón de compañeros de planes sociales con contraprestación laboral.

 

De conjunto el piquetazo realineó al movimiento piquetero del desvío que introdujeron algunas agrupaciones en el sentido de ir a los supermercados, eludiendo la lucha política contra el gobierno y, al contrario, confundiendo frente al piqueterismo oficial que llama a “controlar los precios en las góndolas”. El Bloque Piquetero Nacional marcó el rumbo de las paritarias, cuando el gobierno y la burguesía buscan aislar a los desocupados y acabar con los planes sociales, sin acabar con la desocupación y el hambre, que se agrava entre los más necesitados por la galopante inflación.

 

Planteamos el aumento y la universalización desde la unidad de clase y la lucha por la inserción laboral, la obra pública, la reducción de jornada y las bolsas de trabajo de las organizaciones piqueteras.