El pasado sábado 31 de julio, un importante plenario de afiliados a la CTA aprobó el programa de la Lista 3 de Unidad Clasista y proclamó a sus principales candidatos.

El plenario fue el resultado de un agrupamiento de más de mil candidatos para las elecciones del 23 de septiembre, logrados entre Tribuna Docente, Tribuna Estatal, la lista Naranja de docentes universitarios, la Lista Naranja de Prensa, la Agrupación La Pista de Aeronáuticos, además de trabajadores azucareros, de Ucra, Atilra, judiciales y centenares de compañeros independientes. Se ha conformado una lista nacional con representación en doce provincias, además de veinte listas seccionales en la provincia de Buenos Aires y otras tantas listas seccionales en el interior. Una enorme base de lucha en todo el país.

El plenario caracterizó el profundo proceso de integración de la CTA al Estado. Una central que pretendió postularse como una alternativa independiente a la tradicional burocracia de la CGT, pero que terminó asimilándose por completo a su programa y a sus métodos.

La fracción que encabeza Yasky ha elegido el camino de asociarse con Moyano, en un frente que defiende los intereses del gobierno. La de De Gennaro, a otros sectores de la oposición patronal. Las diferencias De Gennaro con Yasky no están establecidas en la metodología ni en la orientación de los gremios que ellos dirigen, donde no hay reconocimiento de las minorías, hay fraudes electorales, han desaparecido las asambleas generales y se firman cláusulas de “paz social” que han hundido salarios y condiciones de trabajo, tanto entre los docentes como entre los trabajadores de ATE.

Ambos son responsables de enterrar el reclamo histórico del reconocimiento gremial de la Central y cerrar el camino a la formación de nuevos sindicatos independientes al atar sus destinos al gobierno o a la oposición patronal. Así, han trasformado esta elección en un campo de maniobras, donde con Yasky juegan Sabbatella, Moyano, el Ministerio de Trabajo y algunos intendentes kirchneristas, mientras con De Gennaro actúan intendentes radicales, Solanas, los patrones de la Federación Agraria y algunos “socialistas”.

En ese cuadro, la Lista 3 es una alternativa de trabajadores al derrumbe de la vieja dirección de la central. La campaña concentrará nuestra intervención en lugares estratégicos de concentración obrera, como los ingenios de Salta y Jujuy, los metalúrgicos de Villa Constitución, los mineros del Turbio, los trabajadores del astillero Río Santiago y las seccionales de La Plata-Ensenada, Neuquén, Rosario y Capital, entre otras. Focalizando la lucha por el voto y la fiscalización en cien lugares de votación estratégicos, verificaremos el progreso de las posiciones clasistas, más allá de los inmensos fraudes que están planteados con la llamada afiliación individual y la injerencia de los punteros patronales en las listas de ambos sectores.

El plenario constituyó un comité de campaña con los principales candidatos y dirigentes de cada uno de los gremios involucrados. Se aprobó la salida de una carta abierta a los trabajadores de la CTA caracterizando la crisis de la dirección actual de la CTA y la necesidad de una lista clasista con un programa de independencia política. También se editarán declaraciones particulares en las localidades donde esté presente la Lista 3, presentando los candidatos locales y provinciales como parte de una propuesta nacional. El plenario constituyó un importante paso en el lanzamiento de una gran campaña nacional por una CTA independiente del Estado y de las distintas variantes patronales.